El nuevo seleccionador nacional Noel Sanvicente, al saber que los partidos contra Omán e Irán no eran posibles, de inmediato trazó una nueva línea de acción y con la colaboración de la Federación Española y el respaldo de la venezolana, armó un módulo de trabajo de diez días, labor que concluyó el martes con el saber y sabor de objetivo cumplido.
Sanvicente convocó a 22 jugadores que cumplen campaña en el exterior, especialmente en territorio europeo e incluyó en la lista al cancerbero Alain Baroja (Caracas FC), para ayudarlo a encauzar el caudal de condiciones que tiene para la defensa del arco.
Lamentablemente, en las primeras sesiones, Juan Falcón (Metz de Francia) sufrió un desgarro y debió abandonar el campamento en la Ciudad Deportiva Las Rozas de la capital española, mientras que Fernando Amorebieta, aunque estuvo presente, realizó trabajo por separado.
Antes del módulo de trabajo en la capital española, en septiembre, la Vinotinto cumplió con un par de partidos amistosos en territorio asiático. El primero de ellos ante Corea del Sur, que se perdió 3-1 y el segundo frente a Japón que concluyó a dos goles por lado.
Después de intensas jornadas, unas simples y otras dobles, como lo diera a conocer continuamente el departamento de prensa de la Federación Venezolana de Fútbol, Sanvicente, a grandes trazos lo dijo: “El objetivo del módulo se cumplió”.
Al referirse a los detalles, el seleccionador nacional desveló su plan maestro y no es otro que establecer “una metodología de trabajo, con conceptos futbolísticos de ataque y defensa coordinada en lo que será un nuevo ciclo venezolano que busca mejores planos en el concierto internacional”.
No quiso dejar a un lado Sanvicente referirse a los jugadores convocados a Las Rozas, a quienes alabó porque “se vieron con ganas, hay futbolistas de futuro y otros de más experiencia, pero por sobre todo se nota la calidad”.
El seleccionador nacional, quien suple a César Farías, también dio su mirada al futuro y señaló que, “claro está, nuestro fútbol debe seguir mejorando su calidad tanto por los jugadores como por los entrenadores para llegar a mejores cosas”.
Sobre la incorporación de nuevos jugadores y la vuelta de otros que han sido fijos en el pasado, Sanvicente, sin rodeos puntualizó que “Sea Arango o Luis o Pepe, todos tienen que venir a trabajar, a aportar por el grupo; sé que Arango por sus cualidades lo puede hacer, me interesan sus características para que el grupo se beneficie. No hay problemas con ninguno y el que sea llamado espero que dé su aporte para beneficiar al equipo”.
En la parte final, además del agradecimiento a la dirigencia española por las facilidades que hicieron posible el módulo de trabajo en España, San Vicente, tajante, a tono de mensaje indicó que “vengo a trabajar y a hacer todo lo posible con esfuerzo y sacrificio para llegar adonde queremos; si salgo negativo todo va a salir mal; yo me fajo y trabajo para lograr los objetivos que no es otro que clasificar al Mundial”.
Venezuela tiene pautado un partido amistoso el 14 de noviembre próximo frente a Chile en la ciudad de Antofagasta, que luce, a todas, la primera oportunidad para saber y entender el trabajo cumplido en España.