Pido la palabra – Peligrosa insubordinación…

La violencia como instrumento de dominación política es una práctica común en regímenes militares de espíritu totalitario. Es así como el miedo resulta ser el arma más efectiva aplicada por el despotismo para doblegar la voluntad de un pueblo y perpetuarse en el gobierno. El poderío militar y armamentístico se exhibe con reiterativa vehemencia a la par de los amenazantes discursos de los jerarcas tendentes a mantener a raya cualquier disidencia o intento de cambio por vías alternas a las establecidas en la mascarada democrática y electoral del país. Se han visto totalitarismos extremos, donde la violencia se hace impúdica, generalizada y sanguinaria. En Venezuela, aunque comienzan a darse casos muy preocupantes, todavía no hemos llegado a esos extremos…
El régimen venezolano, durante los últimos 15 años,  se ha dado a la tarea de armar los llamados colectivos con miras a conformar las milicias de la revolución. El desmesurado poder conferido a estos grupos, cuyos cabecillas se exhiben y pasean por los pasillos de Miraflores y hasta se tomaron fotografías con el comandante eterno, ha colocado al régimen en una situación muy delicada. Una especie de para-gobierno de barrio se ha generado como producto de esta aberrante practica de dominación social llevada adelante por los dioses revolucionarios, con graves consecuencias puertas adentro del proceso. En este momento, el miedo recorre los pasillos internos del recinto revolucionario. Los atroces ajusticiamientos producidos en las últimas semanas, desnudan una crisis muy seria que debe preocupar no solo al gobierno, sino a todos los sectores de la sociedad democrática venezolana, ya que estamos en una situación de alto riesgo con la presencia de estos irracionales grupos armados que se sienten dueños de la revolución, aun por encima del propio gobierno de Maduro…
En este grave escenario, a la oposición democrática venezolana no le queda otra alternativa que ajustar las desmesuradas y demenciales apetencias  personales. Bajar la guardia y la pugnacidad interna se hace obligante frente a la historia y de cara a los eventos por venir. Hoy más que nunca la unidad superior debe privar por encima de las mezquindades…
Mis comentarios:
.- Los grupos colectivos fueron hechura del Comandante Eterno, y veneran su memoria con matices teológicos…
.- La condición teológica dada a la figura del Presidente fallecido hacia sus seguidores, en la práctica política confiere a estos grupos, ese rango supra-constitucional que les coloca, en el nombre de la revolución, por encima  del derecho a la vida…
.- El derecho a la vida como Derecho Humano fundamental es violado a diario en un país donde la norma es la violencia como instrumento de dominación política…
.- Estamos entrampados en un laberinto de violencia que ahora recorre los pasillos internos del régimen…
.- El cuento chimbo del imperio, de Uribe o el terrorismo de factores de la oposición, se contradice con las expresiones de grupos colectivos que señalan a miembros del alto gobierno, directamente…
.- Las contradicciones de información aportada por los altos jerarcas del gobierno, dice mucho del pánico colectivo que recorre los tuétanos del régimen…
.- El presidente Maduro se ha topado con sus propios demonios…
Quien dice al delincuente: “tú tienes razón”, será maldito del pueblo y detestado de la gente…(proverbios 24:24)
[email protected]
@SERGIOBORGEL