Empezó el mes de octubre y los barquisimetanos comenzaron a buscar sus regalos de Navidad.
Pero al llegar a los grandes almacenes de artículos para el hogar, se dan cuenta que el inventario es el mismo desde hace cinco meses y lo poco que hay les parece costoso.
“Es desesperante porque busco es una nevera. Cuando la encuentro sólo hay una y es incomprable”, dijo María Peña, una consumidora.
Tal situación preocupa al consumidor y al vendedor. Diciembre llegará y no hay muchas cosas para ofrecer ni comprar.
En estos últimos meses se ha podido constatar que la adquisición de electrodomésticos como las neveras, secadoras, lavadoras, televisores, licuadoras, cafeteras eléctricas entre otros, han aumentado debido a las festividades navideñas.
Pero la devaluación del bolívar ante el dólar, la inflación, el retraso en la importación, la escasez de divisas y la desconfianza que hay entre las grandes cadenas de distribución de electrodomésticos y los vendedores, crea un círculo de trabas que condena al establecimiento a disminuir sus ganancias.
“Esta debacle comenzó tras el Dacazo. Mi jefe quiere vender lo que llegó en marzo y se niega a pedir un nuevo lote para diciembre porque no sabe si le llegará para esa fecha, ni cuál medida dictará el Gobierno para Navidad”, explicó una dependiente quien prefirió quedarse en el anonimato.
Aunque, según el gerente de otro almacén, hay otras razones por las cuales no existe inventario. “Muchas veces los distribuidores no saben si la mercancía está en el puerto o no tienen inventario por la falta de divisas”, declaró el gerente.
También agrega que cada vez llegan más personas preguntando por neveras, lavadoras y secadoras pero la mayoría de los almacenes tienen como máximo dos existencias por cada artículo.
“Hoy han preguntado cinco personas por la única nevera que tenemos y nadie puede comprarla: vale 78 mil bolívares”, comentó el gerente.
Muchos de los comerciantes tienen la esperanza de vender parte de su mercancía a partir del 25 de este mes.
“A partir de esa fecha los trabajadores públicos empiezan a recibir sus salarios. Puede ser que muchos vengan a comprar antes del aumento de precios”, dijo la trabajadora de un local.
