Para recordar: “Y ésta es la vida eterna, que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo a quien tú has enviado” (Juan 17:3).
Puede usted contestar, ¿Quiénes fueron o son las siguientes personas: 1) El Capitán Matthew Webb; 2) Annette Kellerman; 3) Felix Baumgartner; 4) Nick Wallenda 5) Carlos Coste?
Las hazañas, de quienes estamos nombrando como héroes, respectivamente, son: 1) El primero en cruzar, nadando, el canal de la Mancha (25/08/1875); 2) La primera dama en cruzar el mismo canal (06/08/1926); 3) El austriaco que se lanzó en caída libre desde casi 40 mil metros de altura (13/10/12); 4) Primera persona en atravesar el Cañón del Colorado, utilizando una cuerda de 457 metros de largo (23/06/13) y 5) Excelente apneista venezolano, quien estableció Récord Guinness, al desplazarse 150 metros durante dos minutos, 32 segundos y 52 centésima, en la Riviera Maya, en México (04/11/2010).
Mientras escribíamos este artículo ocurrió, el 01 de Octubre de los corrientes, el lamentable doble homicidio, del joven diputado Robert Serra y María Herrera (según una fuente, era licenciada en Educación).
Por la deshumanización que existe, sobran quienes digan que otros se alegran por estas muertes tan horrendas; aunque los hubiere, con temor a equivocarnos sus nombres dejarán de sonar dentro de poco; menos, si dicen “saber quienes son”, pero no encuentran a los que ocasionaron este crimen. Tal vez pudiera pasarles, como a los héroes olvidados mencionados al principio de este artículo.
En nuestra opinión, desde los héroes bíblicos (José, Josué, Sansón, Esther, Daniel) pasando a los guerreros, libertadores, científicos, deportistas y el mundo en general; aún tomando en cuenta los creados en la ciencia ficción y otros, los personajes de la Biblia, siguen siendo preponderantes ¿Por qué?
El término héroe se usa por primera vez en la Biblia, adjudicado a Benaía, hijo de Joaida (2do. Libro Samuel 23:20). Los recopiladores de algunas versiones bíblicas, llaman al capítulo 11 de Hebreos: “Grandes Héroes de la Fe”. Entonces ¿Por qué estos hombres no pasan al olvido? Porque ellos se sujetaron a la voluntad de Dios y nunca ambicionaron fama mundanal, aún, haciendo el bien.
Al respecto E. de White, señala: “En este mundo, esos héroes de la fe fueron considerados indignos de la vida; pero en el cielo están registrados como hijos de Dios, dignos del más alto honor…” (En Lugares celestiales, p.270).
Según la autora citada, el éxito de estos hombres y mujeres de la fe, estuvo en “no atraer a las personas hacia ellos”, sino a Jesús, y algunos, actualmente, en medio del “bullicio y la conmoción religiosa, se olvidan del Calvario y la cruz”, procurando recibir alabanzas ¡Cuando Cristo es el único a ser exaltado! Y nunca vendieron sus almas por dinero o aplausos del mundo.
Lo más importante, enfatizó White: “Aunque sin honor ni reconocimientos terrenales, eran héroes de la fe. De sus labios salían palabras de elocuencia divina que hacían temblar al mundo” (Hechos de los Apóstoles, p. 64).
Según texto inicial, ni siquiera Jesús, quien no puede ser considerado como algún héroe terrenal, porque era y es Dios, trató de atraer la gloria para sí, y humanándose quiso que conociéramos a su Padre; y a él mismo, a través de su humilde obra y su gran sacrificio por la humanidad.
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