Cinco muertos y cinco heridos fue el saldo de un enfrentamiento entre funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y miembros de los colectivos Escudo de la Revolución y 5 de Marzo, en el edificio Manfreddy, en el sector Quinta Crespo del centro de Caracas.
Entre los fallecidos se encuentra el líder del colectivo 5 de Marzo, José Odreman, lo cual generó una situación de rehenes durante la cual fueron retenidos dos agentes del órgano policial por varias horas, hasta que fueron liberados.
Además, motorizados del grupo armado se trasladaron hasta la subdelegación Propatria del Cicpc, donde habrían intentado «tomar» esa sede, como represalia por la muerte de Odreman. Se conoció que efectivos del cuerpo detectivesco de todas las subdelegaciones de Caracas recibieron órdenes superiores de mantenerse alerta máxima ante esta situación.
Los hechos
La información que se manejó durante todo el día fue extraoficial, pues en el transcurso del día las autoridades tanto políticas como policiales mantuvieron un hermetismo casi total.
Los hechos señalan que alrededor de las cuatro de la madrugada comenzó el procedimiento en el edificio ubicado entre las esquinas Mamey y Dos Pilitas, donde se produjo un primer tiroteo que culminó con la muerte de uno de los presuntos delincuentes. Posteriormente, acudieron al sitio integrantes de otros colectivos, entre ellos Odreman, quien minutos antes de ser abatido en otro presunto enfrentamiento se dirigió a las cámaras del canal colombiano NTN24, para «responsabilizar» al ministro del Interior y Justicia, Miguel Rodríguez Torres, por su destino: «Ciudadano ministro, le pasa a José Odreman cualquier cosa, lo asumo y le digo que la responsabilidad es de usted, porque está haciendo estos escenarios», manifestó poco antes de su muerte. Así mismo, Odreman ofreció declaraciones a las cámaras de Televen y afirmó que la muerte de su compañero fue un «ajusticiamiento» y acusó a efectivos del Cicpc por «lavar» las evidencias.
Tras la muerte del vocero, se produjo una situación de tensión que duró hasta las tres de la tarde aproximadamente, cuando se retiraron las fuerzas de seguridad.
La versión oficial
No fue sino hasta pasadas las cinco de la tarde del martes cuando el director del Cicpc, José Gregorio Sierralta, ofreció una rueda de prensa desde Valencia para confirmar las cinco muertes. No obstante, desmintió que fueran colectivos y aseguró que se trató de miembros de una banda de delincuencia organizada y dirigida por Odreman, que era investigado por un caso de doble asesinato que no precisó.
Dijo que el primer fallecido se llamada Carmelo Sánchez y era el segundo de la supuesta organización criminal. Agregó el comisario que en el procedimiento incautaron seis armas de fuego y dos carros solicitados por robo.
Contradicciones
Las declaraciones de Sierralta pasan por alto el perfil de la persona a la que señaló como líder de una banda criminal. José Odreman tenía una cuenta en la red social Twitter, @psuvodreman, en la cual deja claro su proximidad con las más altas figuras del alto gobierno. De hecho, aparece al lado del exvicepresidente José Vicente Rangel. También hay otras imágenes al lado de la primera dama, Cilia Flores; del diputado Robert Serra, del general Wilmer Barrientos, y del mismísimo Hugo Chávez. En una de ellas, con fecha del 13 de septiembre, porta una acreditación oficial.
Desmienten vinculación con caso Serra
A través de mensajes publicados en su cuenta Twitter, el director nacional del Cicpc, José Gregorio Sierralta, desmintió que la situación generada en la sede del colectivo estuviera relacionada con la investigación sobre la muerte del diputado Robert Serra. Según esta versión oficial, la presencia de uniformados en Quinta Crespo estuvo determinada por otra investigación.
También negó la versión de seis personas detenidas por su presunta participación en el asesinato de Serra.
Más allá de estas breves aclaratorias, hasta el momento no hay versiones oficiales. No obstante, la información que ha llegado a manos de los periodistas, señala que al menos dos de los seis detenidos serían agentes de la Policía de Caracas que actuaban como escoltas del parlamentario asesinado y estarían siendo interrogados en la sede del Sebin. Las mismas fuentes aseguran que el allanamiento en la sede del colectivo estuvo relacionado con el mismo caso.
