@FelipeMujica
Comenzaré relatando un episodio histórico para que se entienda un poco el título del artículo. Antes debe quedar claro, que ni para mí, ni para todos los socialistas del MAS, la MUD es nuestro adversario. Nosotros somos opositores, pero somos una oposición distinta.
El ejemplo que quiero relatar tiene que ver con la rectificación de los chilenos, después de 17 años de confrontaciones y desastres entre los socialistas y demócratas cristianos, quienes no conseguían un acuerdo que les permitiera unir al país contra el régimen de Pinochet.
Tres rectificaciones fueron claves para ellos. En primer lugar entendieron que la oposición chilena sola no podía, en segundo lugar incorporaron en la alianza a Patricio Aylwin, quien era representante de la centroderecha y había acompañado el golpe de Pinochet. Y finalmente lograron establecer un discurso que no sólo le hablara a su sector, también se conectaron con el pinochetismo.
Hubo un aspecto más que no se puede desestimar. La madurez y desprendimiento de Ricardo Lagos, quien, teniendo más votos que Don Patricio y contando con el partido más fuerte, pudo de manera inteligente admitir que él no era el mejor interlocutor, el no era el mejor candidato. Chile necesitaba a Patricio Aylwin para morderle al régimen de Pinochet lo necesario para vencerlo y retomar la esperanza de paz y progreso que hoy es una realidad en la nación sureña.
¿Cuándo veremos eso en Venezuela, cuándo veremos ese desprendimiento?
Nosotros con responsabilidad le decimos al país que la MUD como centro de concertación de partidos ha fracasado. Su estrategia política ha estado llena de errores y torpezas. No nos quedaremos callados acompañando la vanidad de los personalismos e intereses particulares de unos pocos.
Tenemos 13 años en la oposición. Hugo Chávez ganó 18 de 19 elecciones, de las cuales en los últimos tiempos nos venció en dos enfermo y en otras tantas lo hizo después de muerto. ¿Quien es el culpable de esas derrotas? Estamos obligados a reflexionar todos, incluidos la MUD. De lo contrario seríamos unos irresponsables.
En el MAS no nos quedaremos cruzados de brazos ante los errores de la MUD y compañía. Insisto. La MUD no es nuestro enemigo, pero tenemos que decirles que están equivocados. Y decirlo no en encerronas.
En Venezuela estamos obligados a desmontar el “no volverán”, pero no podemos hacerlo simplemente repudiando al gobierno y ripostar con el “vete ya”. Esa estrategia hay que desaparecerla.
En el país debemos entender que la unidad es un todo. No podemos hablar de unidad si no hemos transitado el proceso de la unión, y lo verdaderamente importante es la unión de los venezolanos. No tiene sentido tratar de consolidar una unidad para liquidar a la otra parte. Ni la unidad oficial, ni la unidad opositora le sirve a Venezuela. Para transformar el país necesitamos la unión de todos.