El sector industrial podría superar la crisis de productividad en la que se encuentra sumido, si el Ejecutivo nacional toma las medidas urgentes que se requieren para facilitar la obtención de materia prima.
El año 2014 ha sido difícil para las industrias que hacen vida en el país debido a la desaparición de insumos esenciales como el aluminio, el hierro y el plástico. Luis Marín, presidente ejecutivo de la Cámara de Industriales del estado Lara, señaló que “la mayoría de las empresas padecen por la falta de insumos disponibles en el ámbito nacional (en su mayoría provenientes de las industrias básicas del Estado, ubicadas en el oriente) y por no disponibilidad de divisas para las importaciones”.
La situación incide en la capacidad productiva del sector en un 50%, según las últimas encuestas expuestas por Conindustria en el último congreso.
“Mientras no se tomen medidas como la flexibilización en el sistema cambiario o el incremento de la producción primaria nacional, la situación podría agudizarse en el último trimestre del año. La producción nacional depende de la aplicación de estas medidas”.
Mientras se dan estas circunstancias, las empresas están en la obligación de mantener las nóminas de trabajadores, “sin poder hacer los ajustes que requieren, lo cual dificulta la permanencia de las empresas”.
Pese a esta realidad, Marín considera que el país tiene alternativas y potencialidades que puede aprovechar para superar la crisis en el sector industrial y por ende retomar la senda de productividad.
“El Gobierno ha dado cierta flexibilidad y oportunidades para que las empresas puedan exportar sus productos, pero eso no es posible sin una capacidad operativa que permita, en primer lugar, abastecer el mercado nacional y de allí los mercados internacionales”, explicó.
Las industrias larenses no escapan a la realidad nacional, “el sector industrial se ve afectado de manera uniforme por la aplicación de las políticas nacionales, es una realidad que va más allá de las competencias de los gobiernos municipales y regionales”.
Cada vez son más las empresas que paralizan sus actividades, previa solicitud ante el Ministerio de Trabajo. “Muchas de estas industrias solo han podido trabajar dos o tres meses en lo que va de año, en especial en el sector metalmecánico. Ello significa que van al ritmo de la llegada de materia prima, lo que explica la baja en la producción”.
En la región, son muchos los casos de paralización temporal y “eso no es buena señal”, aunque las características de cada empresa son diferentes.