Los estudiantes de la Escuela de Ingeniería Agroindustrial de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado continuaron este jueves con sus manifestaciones de calle para reclamar mejoras a las instalaciones donde reciben clases.
En esta oportunidad llegaron hasta la sede del rectorado de nuestra máxima casa de estudios, en la carrera 19, donde cerraron parcialmente el paso de vehículos para exteriorizar sus reclamos con pancartas, consignas y pintas en los vehículos.
Joana Gouveia, una de las líderesas de la protesta, refirió la problemática de los 700 jóvenes que cursan estudios en esa área universitaria.
Dijo que, en primer lugar, la infraestructura en la cual reciben clases no es la más adecuada pues se trata de viejos galpones que anteriormente eran ocupados por la Escuela de Veterinaria.
Los salones y laboratorios carecen de aire acondicionado por lo que prácticamente reciben sus clases mientras hacen sauna.
“Pero tampoco tenemos agua y las salas de baño no son las más agradables pues no hay la suficiente dotación de artículos de limpieza, en especial desinfectantes”, agregó la dirigente.
Otra necesidad es la de técnicos para que los alumnos puedan recibir una formación plena que les permita capacitarse de manera óptima para ejercer como ingenieros agroindustriales cuando egresen con sus títulos.
Joana Gouveia informó que desde hace algunos años existe un proyecto que no ha sido hecho realidad por lo cual están exigiendo de las autoridades universitarias sacarlos de las gavetas.
Se trata de un proyecto elaborado por conocedores de la materia agroindustrial que, de llevarlo a cabo, convertiría a esa especialidad en una verdadera escuela donde profesores y alumnos podrían acudir a clases con mayor comodidad.
La de este jueves no fue la primeria manifestación pública del estudiantado para llamar la atención sobre la situación que confrontan, pero hasta ahora las autoridades de la UCLA no habían dado respuesta alguna a sus planteamientos.
“No tenemos respuesta alguna por parte del decano a lo que estamos reclamando, que consideramos es muy justo pues se trata de lograr que Ingeniería Agroindustrial cuente con recursos suficientes, económicos, técnicos o docentes, para que no siga como la cenicienta de la universidad”, dijo otro de los estudiantes.