El pitcher barquisimetano Eduardo Figueroa cumple un sueño al vestir el uniforme de los Cardenales de Lara, equipo al que seguía desde niño y al que llegó procedente de los Tiburones de La Guaira en una transacción previa al arranque de la estación 2014-2015.
“Me siento muy contento de estar en este equipo, con el que siempre soñé estar desde pequeño porque esta es mi ciudad. Estoy muy agradecido con la gerencia porque me trajo y tengo ganas de ayudar lo más que pueda”, afirmó el derecho de 25 años de edad, quien se repartió la campaña entre las filiales A fuerte (Daytona), doble A (Tennessee) y triple A (Iowa) de los Cachorros de Chicago.
“Me sorprendió el cambio. Estaba en el hotel e iba al estadio y recibí la llamada, me mandaron un mensaje y me sentí contento y emocionado. Llamé a mi mamá y le dije que me habían cambiado y estaba contenta. Había sido cardenalero desde pequeño”, rememoró quien en ligas menores tuvo foja de 3-3 con efectividad de 4.66 en 21 juegos, 13 de ellos como abridor.
El hecho de que pueda trabajar tanto desde el inicio como desde el bullpen, lo hace muy útil, amén de no tener restricciones de ninguna clase. “Hasta ahora no han hablado conmigo pero estoy dispuesto a ayudar en lo que sea, como abridor o relevista. Sólo quiero la oportunidad de pitchar y poder ayudar a este equipo”.
Superó problemas en la ingle que lo obligaron a terminar la temporada en clase A fuerte. “Me siento contento con el trabajo que hice en triple A. Fue lo mejor del año y luego fui a doble A como abridor porque lo necesitaban por un tiempo. Luego me lesioné y terminé en la clase A fuerte”.
Los oseznos le han pedido que “trabaje fuerte” y le advirtieron que “estarán pendientes de mí porque el año que viene tienen nuevas expectativas conmigo. No tengo restricciones”. Tiene la esperanza de que el renovado Cardenales pueda ser campeón y está contento por poder hacer su aporte para ello junto a los otros compañeros que han llegado por la vía de cambios.
En la temporada 2013-2014, Figueroa lanzó cinco juegos para los Tiburones, uno de ellos como abridor y dejó balance de 1-1 con 12.00 de efectividad, tras trabajar apenas seis episodios.
