Iván Simonovis, ex jefe policial en arresto domiciliario, debería pedir perdón al pueblo venezolano por la muerte de dos manifestantes pro oficialistas por la que fue condenado en 2009, sostuvo el domingo el primer vicepresidente del Parlamento.
La declaración oficialista se conoció después que el líder opositor Simonovis fuera beneficiado el sábado en la madrugada por un tribunal local con una medida de detención domiciliaria debido a varias afecciones de salud, como osteoporosis y problemas estomacales.
«Creo que hoy debería arrepentirse, pedir perdón al pueblo venezolano, a esos hombres y mujeres que él, con las órdenes que emitió, les sesgó la vida», señaló Darío Vivas, primer vicepresidente del Parlamento, durante las celebraciones adelantadas en Caracas con motivo del Día Internacional de la Paz.
Vivas se refiere a dos de las 19 muertes de manifestantes ocurridas durante el fallido golpe de estado en abril de 2002 contra el entonces presidente Hugo Chávez, fallecido en marzo del 2013 de cáncer.
Por esos hechos, Simonovis, ex secretario de Seguridad de la alcaldía de Caracas, fue condenado en 2009 junto con otros dos jefes policiales a 30 años de cárcel.
En opinión de Vivas, la familia de Simonovis puede «disfrutarlo» y «tenerlo en su casa vivo, pero las personas que él ordeno que masacraran no van a tener nunca a sus parientes a su lado».
En relación con el arresto domiciliario de Simonovis, Vivas destacó que «el gobierno siempre ha tenido actitud humanitaria».
El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela ha precisado que la medida a favor de Simonovis es temporal y «una vez mejore su salud deberá regresar a su sitio de reclusión».