La exmagistrada del Tribunal Supremo de Justicia, Cecilia Sosa, asegura que la decisión de medida humanitaria para Iván Simonovis, viene de Miraflores. De lo contrario, “la juez que emitió la sentencia no estaría en su cargo”.
En detalle, Cecilia Sosa considera que el TSJ otorgó la medida por el temor de que se agravara el estado de salud del comisario Simonovis, situación que lejos de contribuir a la imagen del Gobierno, la deterioraría aún más. “El Gobierno nacional le asignó a Iván Simonovis toda la responsabilidad de las muertes ocurridas en abril de 2002. El rechazo del chavismo a su figura no viene de la casualidad, sino a la acción premeditada del Gobierno de responsabilizarlo completamente, como si él hubiese orquestado personalmente el Golpe de Estado. No creo que la sentencia de casa por cárcel se haya hecho sin consulta. Esa orden viene de Miraflores porque tenemos un TSJ completamente arrodillado”.
En este contexto, Sosa calificó como “sádica” la aclaratoria que posteriormente hizo el tribunal, sobre un posible retorno de Simonovis a la cárcel, una vez que recupere su salud. “Cuando un juez da una medida de ese tipo, lo hace luego de un análisis completo de su condición de salud. El Gobierno tenía mucho temor de que le ocurriera algo grave estando preso; por eso lo envían a su casa. Por otra parte, el tribunal aclara que volverá a la cárcel una vez recupere su salud para complacer a la tendencia más radical del chavismo”.
Basada en su conocimiento jurídico, Sosa destaca que una medida humanitaria no puede estar condicionada pues se aplica cuando la enfermedad es permanente. “La medida humanitaria no contempla un regreso a la cárcel como se pretende hacer ver, pues si fuera una patología pasajera se lleva al centro de salud y retorna a cumplir su condena. Si la juez determinó que debe recuperarse en casa es porque conoce perfectamente que no puede continuar recluido en una cárcel. Esa aclaratoria responde sólo al interés de complacer a los radicales, pues sabían que la reacción del chavismo sería intolerante. El sadismo del Gobierno vuelve a estar presente, así como la necesidad de seguir la línea más radical del partido”.
Hasta el momento, se desconoce el texto de la sentencia que le permitió a Simonovis cumplir condena desde su hogar. “Todo en el poder judicial es oscurantismo. ¿Por qué dieron la sentencia en horas de la madrugada? Cuando este Gobierno pase y se convierta en la oposición, ¿le gustaría a los chavistas que se le aplicara este tipo de medidas? Ellos no van a ser eternos en el poder. Es una actitud morbosa que está enfermando a la sociedad y cambiando sus valores.
-¿Quién tiene el control del poder judicial en Venezuela?
Cilia Flores.
-¿Quién manda en el Tribunal Supremo?
El presidente de la Asamblea Nacional. Hay una guerra de poder entre Cilia Flores y Diosdado Cabello. La instrucción de darle casa por cárcel a Simonovis tiene que venir de Miraflores y la contraorden de un posible retorno viene del presidente de la Asamblea Nacional. La fractura institucional del PSUV sigue presente.
