Hasta la fecha se han confirmado por el Instituto Nacional de Higiene, INH, 8 casos de chikunguña en la entidad, de los cuales 7 pertenecen al estado Lara y 1 proviene del estado Yaracuy.
La información la dio a conocer la directora regional de salud, doctora María Teresa Pérez, durante un operativo especial de fumigación y abate en la Escuela Stella Cechini de la parroquia Catedral.
Destacó que se mantienen 131 casos sospechosos del virus, pacientes a los cuales se les tomó muestra que fueron enviados al INH, la mayoría de ellos se reportaron en el municipio Iribarren con 53 casos, seguido por Torres con 25 y Morán con 14.
Recordó que existen otros estados del centro del país que poseen una mayor cantidad de casos confirmados de fiebre chikunguña, mientras que en Lara se mantiene un bajo porcentaje de incidencia de la enfermedad debido al despliegue de fumigación y control del vector en las comunidades.
Sin embargo, Pérez destacó que la mejor prevención es la eliminación de criaderos.
“La única manera de controlar tanto el dengue como el chikunguña es que todos juntos eliminemos los potenciales criaderos en las viviendas, podemos fumigar, abatizar, pero sólo lograremos eliminar una etapa evolutiva del zancudo y no el vector por completo”.
Por otra parte, se refirió a los casos de fallecimientos aún no diagnosticados que se han presentado en Aragua, Carabobo y Distrito Capital. “Como epidemiólogo debemos evaluar la situación, pues si se trata de casos aislados en sitios diferentes se debe precisar qué medicamentos consumieron, los pacientes”.
Recordó que el único medicamento recomendado, tanto para el dengue como para el chikunguña es el aceteminofén, cualquier otro fármaco puede complicar el estado de salud de los pacientes y agravar la presencia de cualquiera de estas patologías.
La doctora Isis Fernández, directora de salud ambiental y contraloría sanitaria, indicó que el dengue se mantiene controlado con 109 para la semana 37, mientras que se han evaluado 45 mil 669 viviendas, nebulizado 80 mil 489 con equipo liviano.
Además por el aumento en el número de casos se han ampliado las cuadrillas de acción para abarcar mayor cantidad de comunidades y en conjunto con los voluntarios populares concientizar a la ciudadanía para eliminar criaderos en sus hogares, escuelas y espacios comunes.