Este barquisimetano decidió emprender un viaje buscando algo, sin saber qué, lo consiguió. Encontró una familia, hogar y pasión. Como él dice, no fue fácil, pero su historia de lucha y constancia es un admirable ejemplo de un venezolano trabajador, decidido a dar lo mejor de sí para cumplir sus metas. Sus logros son muchos, pero para él eso no es lo importante, lo más valioso es lo que consiguió en el camino, su familia y la sensación inigualable de trabajar en lo que le apasiona, en un set de filmación
Como muchos otros barquisimetanos, Roberto tuvo la convicción de perseguir sus sueños. Su idea siempre fue hacerlo en su ciudad y en su país, sin embargo, por motivos ajenos a su voluntad tuvo que dejar todo lo que conocía para emprenderse en un largo viaje que lo llevaría a ser el hombre apasionado, de familia, que es hoy día. Así fue, que luego de forjar una breve pero prolífica carrera en la radio y un posible brillante futuro en el área, este chico de tan sólo 21 años se vio obligado a mudarse a los Estados Unidos, pero esto no fue motivo para abandonar ese trabajo duro al que estaba acostumbrado.
Tal como nos comentó, el camino no fue fácil, tuvo que pasar por numerosos trabajos. Desde mesonero, valet parking, a lavar platos y limpiar pisos, fueron muchos los sacrificios y trabajo duro que le tocó vivir, pero que sin duda le ayudaron a formar al hombre trabajador que es actualmente. Durante ese trayecto conoció a muchas personas y entre ellas grandes amigos o “ángeles”, como también les llama, que fueron de gran ayuda. De hecho su llegada a la industria del cine no fue programada, en realidad fue algo “orgánica” como él lo explica, pues fue por una de esas personas, quien trabajaba en un set y le comentó que había una vacante que Roberto obtiene su primer trabajo en una filmación. “mi primer trabajo fue cuidar el camión de iluminación y para mí fue como si yo hubiese sido el director de la película, esa fue una gran experiencia y un momento inolvidable, aunque lo que hacía era mirar el set desde lejos. Ahí fui conociendo y conversando con los otros trabajadores, a pesar de que el no saber hablar inglés me limitaba mucho pero fui aprendiendo, la necesidad hace al hombre. Para mi próximo trabajo estaba más cerca del set y cuando me di cuenta ya estaba en la industria”.
Así fue abriéndose paso en el área de producción cinematográfica, lo que le permitió participar en la producción de diferentes comerciales, películas y videos musicales. Pero Peñalver no se limitó a parte audiovisual pues también decidió incursionar en la realización de eventos, como parte del equipo de una reconocida productora en Miami. Llegó a producir grandes eventos, entre ellos el Flashmob que realizó en las 500 millas de Daytona, uno de los espectáculos deportivos más importantes de los Estados Unidos, y fiestas privadas para importantes personalidades como: P Diddy, Lenny Kravitz, Outkast y también para la importante cadena MTV, en la producción de sus reconocidos Video Music Awards.
Aunque le fue muy bien en la parte de eventos, fue en la producción audiovisual que encontró su pasión y a la que se ha dedicado de lleno. Ha trabajado en El Aprendiz de Donald Trump, en El Cartel de los Sapos la película, El Capo II. Además de trabajar junto a grandes estrellas de Hollywood como Bruce Willis, Joe Pantoliano. “Empecé recogiendo y limpiando y a los pocos años ya era productor general o ejecutivo o coordinador. Lo más impresionante es cuando te encuentras con actores o trabajos que ves muy lejos y que no crees ni poder pensar en llegar a ese punto, hasta que estas ahí y te ves hablando y trabajando con esa gente”.
Actualmente, Roberto se encuentra trabajando con Discovery Channel, haciendo las promociones para la Semana del Panda, algo similar a la Semana de Tiburón, además está por empezar la tercera temporada de la popular serie de Nickelodeon, Every Witch Way. “Para mi trabajar en el set es una conexión del más allá, es sublime.”.
El barquisimetano asegura que todo lo que ha logrado a través de los años es obra del trabajo duro y la constancia que ha mantenido en todo momento. Pero también debe mucho de su éxito a su familia quienes siempre han estado allí para él, sus padres, hermanos, esposa e hija, los que han luchado a su lado y asegura son el motor que lo impulsan día a día.
Próximamente, Peñalver espera poder venir a Venezuela para visitar algunos colegios y universidades y llevar un poco de esperanza y motivación a los jóvenes, y quisiera finalizar con parte de ese mensaje: “En lo personal no soy el mejor productor ni el mejor director, no soy la persona más destacada del mundo, hay muchísimos venezolanos que han logrado millones de cosas más que yo. Pero esta es mi historia y es la que cuento y de la que estoy orgulloso. Creo que es una historia de lucha, no tanto de qué he logrado y con quién he trabajado, va más allá, pues si yo lo puedo hacer y yo lo pude hacer y lo hago, ustedes también lo puedes hacer. No hay límites, yo no soy un genio, simplemente soy una persona creativa que se ha enfocado en trabajar. Por eso es muy importante destacar que hay gente muy buena admirable y tienen su historia pero yo tengo la mía y ustedes van a tener la suya, así que hay comenzar a construirla”.
Barquisimeto según Roberto
Barquisimeto es… Hermoso, tiene un paisaje único, gente tan típica y maravillosa.
Un lugar emblemático en la ciudad… El Terepaima, me encanta ir y ver la montaña, ver la ciudad y el valle del turbio.
Un color y un sabor que te hagan recordar la ciudad… Los rojos siempre me recuerdan al cielo de Barquisimeto. El mantecado, me muero por unos helados de mantecado que venden por la Pedro León Torres.
Una canción… Las de Caraota, ñema y tajá, y Los Hijos de Ña Carmen siempre me trasladan a mi ciudad.
Barquisimeto – John Guarenas y El Otro Borges.
¿Qué le regalarías a Barquisimeto? ¡Amor!
@robnacho
