¿Hasta dónde quieren llegar?
Irracionalidad degradante. Atacan la espiritualidad de la inmensa mayoría del pueblo. Pido a Dios los perdone como Jesús nos enseñó a hacerlo, porque no saben que no saben lo que hacen con esta aberrante: «Chávez nuestro que estas en el cielo, en la tierra, en el mar y en nosotros, los y las delegadas, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu legado para llevarlo a los pueblos de aquí y de allá. Danos hoy tu luz para que nos guíe cada día, no nos dejes caer en la tentación del capitalismo, mas líbranos de la maldad de la oligarquía, del delito del contrabando porque de nosotros y nosotras es la patria, la paz y la vida. Por los siglos de los siglos amén. Viva Chávez».
La revolución de la riqueza
En términos, más o menos generales, ciertas formas de riqueza –no sólo el dinero y posesiones- son consideradas “buenas”: la salud, una familia fuerte y afectuosa, ser respetado por aquellos a quienes respetas, etc…Pocos negarían que eso es riqueza, aunque no encaje con facilidad en los cálculos de los economistas actuales.
Para algunos, la riqueza puede significar un poco más de lo que dicta su necesidad subjetiva, sea cual fuere.Entre los pobres, las cosas son menos subjetivas. Para una madre cuya criatura se muere de hambre, un puñado de arroz al día puede ser una riqueza desmedida.
¿Sabe Ud. cuál es el origen de la riqueza?
Para entender el futuro de la riqueza es necesario empezar por su propio origen: el “deseo”.Este término puede reflejar cualquier cosa:una necesidad acuciante o una necesidad transitoria. En ambos casos, la riqueza es algo que satisface dicho anhelo ypuede satisfacer más de un deseo a la vez. Si queremos dar un toque de belleza al recibo de la casa, una pintura o una reproducción barata puede proporcionar una pequeña oleada de placer y, al mismo tiempo, puede colmar el deseo de impresionar a la visita. Aunque la riqueza también puede ser una cuenta corriente en un banco, una bicicleta, una provisión de alimentos o un seguro médico.
Definición actual de la riqueza
En un sentido amplio, riqueza es cualquier posesión, compartida o no, que tiene lo que los economistas denominan “utilidad”, al proporcionarnos alguna forma de bienestar por sí misma o mediante el intercambio con alguna otra forma de riqueza que satisfaga dicho bienestar. En cualquier caso, la riqueza es hija del deseo.
Algunas religiones e ideologías estigmatizan el deseo
Las creencias y las ideologías nos dicen: “Busquemos la felicidad reduciendo nuestros deseos en lugar de colmarlos”.
Durante una cantidad de siglos, la India se limitó a la pasividad en medio de una pobreza y miserias increíbles.
El protestantismo, en Occidente, y el catolicismo en el siglo XX mandó el mensaje contrario. En vez de suprimir el deseo material, predicaron el trabajo duro, la frugalidad y la virtud prometiendo que de seguir esas directrices, Dios te ayudaría en la satisfacción de tus deseos.
En Asia, un severo comunista chino. DengXiaoping, parece que dijo en la década de los 70: “Enriquecerse es magnífico”, liberando a China de su pobreza inmemorial, eso si, con un capitalismo supersalvajede gobierno.
En USA las empresas pagaron 264.000 millones de $ en 2004 por publicidad. En Europa,125.000 millones y 56.000 millones en Japón.
En otras palabras, mediante la religión, la ideología, la publicidad u otros medios, consciente e inconscientemente, las élites de las sociedades, gestionan el deseo, punto de partida de la creación de riqueza.
