Un joven de 20 años de edad fue ultimado en el barrio El Caribe cuando se encontraba conversando con una dama. Tres impactos de balas habrían detonado, uno de los cuales acabó con la vida de Edward Javier Fernández, y otro que se le incrustó en la costilla derecha a María Torres, de 26 años.
El sitio del suceso quedó registrado en el sector Caribito, a cuadra y media de la residencia del hoy occiso.
Según comentaron los vecinos de la zona, Fernández estaba sentado en la esquina junto a Torres, momento en el cual pasó una camioneta Wagoneer, se detuvo y desde adentro dispararon en tres oportunidades.
Al escuchar las detonaciones los vecinos se encerraron. Al rato salieron a ver qué había pasado. Fue cuando en un carro particular auxiliaron a las dos víctimas a quienes llevaron hasta el Hospital Pastor Oropeza, al oeste de Barquisimeto, donde el hombre llegó sin signos vitales y a la mujer la hospitalizaron para drenarle la herida. “Nadie salió al momento por miedo. Es que esto está muy peligroso. Ellos siempre se sentaban ahí tranquilos a hablar sin meterse con nadie”, dijo la tía de la víctima, quien por miedo a represalias no se identificó.
Explicó que desde hacía tiempo no se cometían este tipo de crímenes por el lugar. “Nunca imaginé que se tratara de Edward porque era un muchacho tranquilo, él trabajaba en una marquetería por la calle 50, desde hacía dos años”.
Segundo hermano liquidado
Recordó que Fernández era el segundo de tres hermanos, de los cuales sólo queda la menor de nueve años, pues hoy se cumplen dos años que mataron a Johander Fernández, conocido como El Monito.
“A él lo asesinaron en la otra esquina de la misma calle. Fue por un chisme y cuando lo fue a aclarar dio media vuelta y a traición un guardia que vivía ahí le disparó”, aseveró la dama.
La policía científica inició las investigaciones del suceso a fin de esclarecer el hecho y determinar quién fue el autor material del homicidio que enluta nuevamente a una familia larense.