Según los últimos registros, en el 2007 se producía de 8.000 a 10.000 barriles de asfalto diario. En la actualidad no hay cifras recientes. Paradójicamente, el país que dice poseer las mayores reservas de hidrocarburos en el mundo, delata su deficiencia en el mal estado de sus calles, avenidas y autopistas. Los huecos y las troneras son cada vez más comunes para el venezolano que reza por la integridad de su automóvil cuando tropieza sorpresivamente en ellos. La situación no muestra mejor panorama, pues expertos aseguran que la producción de las refinerías no satisface la demanda del país.
El ingeniero Eleazar Colina, especialista en mantenimiento vial, relató que desde hace cinco años, Petróleos de Venezuela (Pdvsa) dejó de publicar datos de producción de asfalto de sus refinerías. Según los últimos registros, explicó que en el 2007 se producía de 8.000 a 10.000 barriles de asfalto diario, aunque, según el ministro para el Petróleo Rafael Ramírez, en el 2008 se produjeron 27.000 barriles y de estos se exportaban 17.000.
“Primero hay que diferenciar entre asfalto y mezcla asfáltica. Las que producen asfalto en el país son las refinerías (Amuay en Falcón, Bajo Grande en el Zulia) y los que producen mezcla asfáltica son las plantas como Yamaro, Life, Tevial y muchísimas más. Es decir, las plantas compran el asfalto a las refinerías para elaborar la mezcla asfáltica y construir pavimentos flexibles. En otras palabras, lo que se coloca es mezcla asfáltica y no asfalto como se dice en el argot popular. (La mezcla asfáltica está constituida aproximadamente por 5% de asfalto y 95% de agregado mineral)”.
En tal sentido, explicó que existen plantas suficientes de mezclas asfálticas en caliente, pero su producción va a depender de los suministros de asfalto por parte de las refinerías de Pdvsa, las cuales han perdido control de calidad en el proceso de elaboración y despacho del asfalto.
Carpeta asfáltica vulnerable
Al consultarle el motivo de las patologías en tramos viales recién asfaltados, explicó que esto sucede debido a que se hace mantenimiento y rehabilitación sin estudio previo de las causas que originan las fallas ni el estudio de cargas (tránsito).
“Muchas veces lo que hacen es maquillar o tapar fallas que en muy corto tiempo van a aparecer porque no se corrigió la causa de las mismas.
También se hace mantenimiento tardíamente, cuando las fallas han alcanzado un alto nivel de severidad. Para realizar la rehabilitación deben acometerse una serie de estudios previos, los cuales van a indicar la metodología a seguir”.
“El control de peso de vehículos nuevamente pasó al olvido. Se requieren balanzas en sitios estratégicos para controlar las cargas. Las plantas en la región elaboran buenas mezclas pero sin embargo se requiere una buena inspección por parte de los organismos oficiales”, prosiguió.
Adicionó que el agua es el enemigo número uno en la construcción y mantenimiento de pavimentos, situación que amerita una rigurosa vigilancia de los sistemas de drenajes a fin de que el líquido no vulnere la capacidad portante de la estructura del pavimento debido a filtraciones, socavaciones y arrastres de sedimentos.
Plata de Barquisimeto sin mayores operaciones
Hace tres años, la municipalidad, a través de Emica, inició la construcción de la Planta Asfalto Barquisimeto, la cual respondería directamente a las necesidades de componentes necesarios para la rehabilitación y construcción de tramos viales en la región. Sin embargo, desde diciembre del 2013, en coincidencia con su finalización, el Estado asumió la responsabilidad de la instalación pública.
El equipo reporteril visitó la planta que está ubicada en el oeste de la ciudad, colindante con la avenida Circunvalación Norte, a fin de evaluar sus operaciones. Se pudo constatar que las labores en la misma estaban paralizadas, sólo se encontraba el personal de vigilancia y tres camiones aparcados. En la entrada del lugar, había un cartel del Ministerio para el Transporte Terrestre.
Sin embargo, Colina, desestimó la ejecución de plantas públicas en la ciudad, pues consideran que no generan aportes importantes en materia de vialidad.
“Mi opinión y la de muchos conocedores del área es que ya tenemos suficientes plantas instaladas en la región y la experiencia nos ha conducido a afirmar que las industrias de este tipo controladas por organismos oficiales no perduran en el tiempo, porque se echan a un lado los controles de proceso y mantenimiento de la planta y la burocracia termina matando este tipo de industria”.
Adicionó que tanto la municipalidad como Estado deben depender de terceros para adquisición de materiales necesarios para la recuperación de la carpeta asfáltica, ya que existen empresas privadas y especializadas que laboran con rigurosos estándares de calidad.
Recomendaciones
Por último, el también profesor del decanato de Ingenería Civil de la UCLA, expuso como recomendaciones que los programas de recuperación de las calles deben contar con cinco aspectos fundamentales: planificación, programación, ejecución, control y supervisión.
“Se debe empezar haciendo un estudio de condición de pavimento, un inventario, un estudio patológico del pavimento (como el Index condition pavement PCI), un estudio de cargas (tránsito), condiciones ambientales (lluvia)”.
Asimismo, agregó que la temperatura de la mezcla asfáltica caliente no debe ser mayor de 163 ºC ni menor a 135 ºC durante su elaboración. Posteriormente, en la colocación y compactación, la temperatura del citado componente no debe estar por debajo de 121 ºC. Por tanto, destacó la importancia del control que se debe llevar la inspección durante los trabajos de rehabilitación.
Emica depende de terceros para el suministro de asfalto
José Vásquez, presidente de la institución municipal, denunció que empresas como Emica e Invilara reportan 30% más de gastos para la rehabilitación y construcción de tramos viales, por cuanto deben depender de terceros para obtener la mezcla asfáltica.
“El Municipio le inyectó a la planta 10 millones de bolívares para su construcción, pero la transfirieron al Estado cuando tenía 90% de ejecución con el objetivo de perjudicar nuestra gestión. Se realizó una inversión que todavía el Municipio no ha visto su frutos”.
Informó esperar por la Cámara Municipal para la aprobación de recursos concernientes a la Feria del Asfalto, programa que distribuirá 100 millones de bolívares divididos en 20 millones para la Intercomunal Cují – Tamaca, 20 millones para Juan de Villegas y 50 millones para las parroquias Concepción, Santa Rosa y Catedral.