El estudiante Gerardo Carrero, preso en la sede del Sebin tras ser detenido en un campamento «de la resistencia», estaría siendo torturado por efectivos de ese cuerpo de seguridad.
Así lo denunció este lunes su padre, Gerardo Carrero, quien responsabilizó personalmente al director de investigaciones estratégicas del Sebin, Carlos Calderón, por haber sido el autor material de las agresiones.
«Me siento indignado. ¿Ese tipo no tiene hijos? Ni que Dios se los dé, porque no tiene ni corazón ni sentimientos al agredir a un joven que lo único que ha hecho es luchar por su país y pensar diferente al régimen», manifestó el progenitor en referencia al funcionario.
En este sentido, contó que Calderón «arremetió contra mi hijo y lo castigó de la manera tan brutal como lo hizo. Fue amarrado con las manos hacia arriba, esposado, se le partieron tablas en su cuerpo, parado sobre un ladrillo que apenas alcanzaba. Así lo tuvieron desde las 9 de noche hasta las 9 de la mañana. Cuando lo bajaron ese muchacho no se podía ni parar», expresó Carrera.
El estudiante 25 años, cursa una carrera en la Universidad Católica del Táchira, y se encuentra preso desde el 14 de mayo, cuando efectivos de la Guardia Nacional arrasaron con el campamento improvisado que instalaron jóvenes procedentes de todo el país en la sede del PNUD, en Caracas. Luego que los tribunales que tenían causas abiertas a manifestantes decidieran sobreseer casi 300 expedientes a personas que tenían libertad condicional e ignoró a 12 jóvenes privados de libertad por los mismos hechos, Carrera decidió iniciar una huelga de hambre el viernes pasado.
Este habría sido el detonante del ataque. Tras formular estas denuncias, Carrera se dirigió a la Defensoría del Pueblo y a la Fiscalía General de la República para pedir oficialmente que se investigue el hecho que califica como una clara violación de derechos humanos.