Durante un acto de transferencia de recursos a Consejos Comunales y la entrega de obras para el beneficio de los vecinos de la parroquia Caricuao de Caracas, el Alcalde Metropolitano, Antonio Ledezma, propuso la instalación de captahuellas para Cadivi, Pdvsa y el Banco Central, como respuesta a la medida del Gobierno Nacional de someter a los venezolanos a más sistemas de controles como el biométrico.
El también líder de la oposición afirmó que el Ejecutivo debe implementar máquinas en cinco puntos gubernamentales, que son los que manejan la economía venezolana.
“Qué bueno hubiera sido contar con esas maquinitas captahuellas en las oficinas de Cadivi, para saber quiénes fueron los afortunados que se sacaron ese premio gordo de la Revolución. Se imaginan ustedes que las maquinitas captahuellas tuvieran en sus archivos biométricos todas esas huellas digitales, de los que pasaron por el dedazo de Cadivi para buscar lo suyo, por lo menos hoy estaríamos en capacidad de saber quiénes fueron los bienaventurados de poder recibir las decenas de miles de millones de dólares que nos robaron a nosotros los venezolanos”, manifestó.
El mandatario propuso además que si quieren invertir en máquinas lo hagan en el sector petrolero.
“El Gobierno debería pasar por una tarjeta de control biométrico cada barril de petróleo que sale de nuestros pozos a destinos inciertos para ser revendidos, a precio full, en el mercado internacional o a los puertos cubanos, a conciencia de que no nos pagarán ni un céntimo”, dijo.
Ledezma señaló que otro punto a controlar son las bóvedas del Banco Central de Venezuela.
“Para saber así a dónde van a parar las barras de oro que forman parte de nuestras reservas internacionales y cuyo paradero, hoy en día, es dudoso”, comentó.
Planteó la instalación de una tarjeta biométrica en las puertas del despacho de Finanzas.
“Deben colocar la tarjeta en el Ministerio de Finanzas para saber qué ha pasado con el dineral que ha ingresado al país por concepto de deuda, como el caso de los fondos chinos, que suman más de 56 mil millones de dólares”.
Por último, sostuvo que resulta contradictorio que Maduro no aplique las mismas medidas de control en las empresas gubernamentales que distribuyen los productos de primera necesidad y materiales de construcción.
“Por qué Maduro no coloca esas maquinitas captahuellas a las empresas del Gobierno que controlan la cabilla, el cemento, los medicamentos, los repuestos y aceites de motor que manipulan en los bajos fondos”, concluyó Ledezma.