La madrugada del sábado fue asesinado de un tiro en el cuello Manuel David Camacho Sánchez, de 24 años de edad, y quien pertenecía al cuerpo de seguridad de la Policía del estado Lara, aunque en la actualidad estaría de reposo.
El hecho se produjo en una de las vías del caserío El Limoncito, en el municipio Crespo, a pocos minutos de la población de Duaca, su capital, cuando, a la una de la mañana, Camacho se desplazaba en su carro marca Fiat, modelo Palio, color gris, en compañía de dos personas más, de las cuales se presume que uno de ellos es funcionario policial.
A partir de este punto, las versiones que existen sobre el hecho mantienen concordancia. Sin embargo, después de dicha situación, una de las versiones indica que una moto de características desconocidas se colocó a un costado del vehículo exigiéndole a los tripulantes y, específicamente al joven de 24 años, que estacionase el carro y así poder robarlo. Sin embargo, el hoy occiso hizo caso omiso de la amenaza y sus presuntos atacantes accionaron el arma que portaban, impactándolo en el cuello y causándole la muerte de forma instantánea. El vehículo, sin control, se desplazó hasta un extremo de la carretera y recorrió parte de una ladera, donde sus otros dos tripulantes sufrieron lesiones producto de los golpes contra el carro.
La segunda versión de lo ocurrido señala que el otro agente policial, quien se encontraba a bordo del vehículo, sin que se conozca la causa, sacó un arma. Accidentalmente se activó y la bala proyectada le impactó a la víctima en el cuello. Según esta versión, el tercero de los tripulantes, quien estaba en la parte trasera, se habría quedado dormido minutos antes del hecho, y, cuando despertó, ya se encontraba en el fondo de la ladera dentro del carro, con las lesiones producidas. Se desconocen las identidades de los otros dos tripulantes, pero se supo que uno de ellos estaría en una clínica privada atendido por los golpes que sufrió en el hecho.
De cualquier forma, el cuerpo de Camacho fue levantado por los funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, quienes recogieron las evidencias que permitan esclarecer el caso y determinar cuál de las versiones se ajusta a los hechos acaecidos la madrugada de ayer.
A su vez, los funcionarios de la Policía Técnica trasladaron los restos del occiso hasta la morgue del Hospital Central Antonio María Pineda, donde ingresó a las 5 a.m.
Posteriormente, en horas de la mañana de ayer, varios familiares de la víctima permanecían en los alrededores de la morgue así como también agentes de Polilara, esperando que el cuerpo fuera entregado y brindarle las exequias correspondientes. Los dolientes mostraron profundo dolor por la pérdida, mientras que reconocían no saber cómo sucedieron los hechos que produjeron el asesinato del joven que residía en el sector Las Veritas de El Cují, al norte de Barquisimeto. Por su parte, las fuentes que adelantan las investigaciones sobre el hecho, explicaron no descartar ninguna hipótesis que reseñe un robo frustrado o el homicidio accidental.
De cualquier forma, se conoció que con la muerte del funcionario, ya suman cinco los Polilara asesinados durante el 2014.