El jardinero venezolano, Carlos González, se perderá el resto de la temporada 2014 en las Grandes Ligas, luego de que su club, Rockies de Colorado, anunció que el criollo será intervenido quirúrgicamente de su rodilla izquierda.
El pelotero nacional ha experimentado su peor temporada en las ligas mayores al presentar varias lesiones que causaron una disminución en sus números. La operación tendrá a Car-Go fuera por cinco o seis meses, según lo anunció la divisa rocallosa. Estaría listo para los campos de entrenamientos en la campaña 2015 de la Gran Carpa.
El paleador izquierdo explicó que después de analizar opciones para evitar la intervención, tomó la decisión de operarse. “Todo el año ha sido una pelea con las lesiones. Creo que nada puede ser peor que esto”, aseguró el jugador al Denver Post.
Desde el 2013, González ha padecido de problemas en su rodilla izquierda, por lo que es un tema recurrente. “Todavía tengo esa pasión por estar en el terreno de juego. En el primer juego me va bien, puedo dar jonrón y doble, ayudó al club que es lo importante. Pero al siguiente día siento como si me hubiera atropellado un autobús. Es muy fuerte sentirse así”.
Este 2014 ha sido caótico para el bigleaguer, al presentar un esguince de tobillo y ser operado de su dedo izquierdo, el cual lo dejó fuera por un tiempo prudencial durante la zafra en curso. “Es muy complicado salir a jugar así, no me puedo mover bien en la actualidad y eso es lo que ocurre. Ahora mismo espero que nadie batee en la posición donde juego. Cuando tu cuerpo se estresa, la parte mental se ve muy afectada también.”.
El toletero de 28 años deja un promedio de bateo de .238, 11 cuadrangulares y 38 remolcadas en 70 compromisos jugados. En el 2013, los números fueron distintos al dejar average de .302, 26 cuadrangulares y 70 impulsadas en 391 turnos al bate. Su mejor zafra fue la de 2010, al terminar con .336, 34 batazos de vuelta completa y 117 empujadas en 145 cotejos.
Además, Colorado no contará más con el campocorto Troy Tulowitzki, quien tampoco regresará a la parte final del torneo. Dos bajas sensibles para unos Rockies que pierden a sus dos mejores peloteros y que son el corazón ofensivo del club.
“Todo el mundo sentía que algo podría pasar. Lamentablemente no tendremos más a dos jugadores que son muy importantes para nosotros”, explicó el mánager Walt Weiss.