“El Fiscal está muy ocupado, no puede, no vino”, eran las frases comunes que escuchaban entre audiencias, víctimas y hasta los mismos funcionarios. Williams Guerrero, Fiscal Superior del estado Lara, indica que ya no existen excusas para no dar respuesta a la ciudadanía, porque con la reestructuración que se ha realizado en el Ministerio Público se ha logrado descongestionar el trabajo de los fiscales y además depurar el sistema.
Actualmente, un fiscal maneja entre 50 a 150 causas mensualmente, cuando anteriormente tenía entre 200 y 300.
Guerrero indica que desde que comenzaron las especializaciones en las fiscalías se empezaron a agilizar los procesos y atenciones a las denuncias, logrando un mejor servicio de parte de los funcionarios.
En la entidad larense existen 32 Fiscalías, tres municipales y 29 ordinarias. De las cuales trece están ubicadas en el municipio Torres, uno en Jiménez y el resto en Iribarren.
Las fiscalías municipales tienen sus abogados, trabajadores sociales y se encargan de aquellos delitos que tienen como pena tres años de prisión, lo que se busca es que reparen el daño a la víctima o se llegue a un acuerdo reparatorio.
Siempre se busca que el imputado se arrepienta, que repare el daño y que haga trabajos comunitarios. En estas fiscalías municipales, por lo general, se tratan a aquellas personas que se encuentran imputadas por accidentes de tránsito con lesionados, los procedimientos por perturbación de la tranquilidad pública y privada, aquellos que ingieran licor en vía pública.
Asimismo, se encuentran las fiscalías 12, dirección en lo Constitucional y Contencioso Administrativo, las fiscalías 14, 15, 17, con materia de Protección al Niño, en donde se abarca el tema de la manutención, de la adopción. Estas fiscalías solo manejan el área administrativa y civil.
La Fiscalía Tercera en Defensa de la Mujer, la 13, en Materia Penal, es un ente de ejecución que tiene que garantizar el cumplimiento de las penas y de sus formas alternativas. Además, garantizar los derechos de los privados de libertad, que se encuentran en los diversos sitios de reclusión de la entidad.
La Fiscalía 18 y 19, es la de responsabilidad penal para los adolescentes de 12 a 18 años, allí más que todo son juicios educativos y existe prisión solo para cinco delitos que son: homicidio, abuso sexual, tráfico de droga, secuestro y robo agravado.
La Fiscalía 11 y 27 en materia de droga, la 21 con competencia en Derechos Fundamentales, cuando una persona es víctima de algún funcionario policial y militar. La 22 en materia de Corrupción y la 23 aquellos delitos cometidos en contra del ambiente.
El resto de las fiscalías son las de delitos comunes que se encargan los casos de homicidios, secuestros, robos, hurtos, estafas entre otros.
Es precisamente en está parte donde se tenía el mayor trabajo en el Ministerio Público y donde más se veían atascados los funcionarios entre los hechos cometidos, asistir a las audiencias y los juicios.
Ahora cuando se realiza una detención en flagrancia los detenidos pasan directo a la sala de flagrancia, en donde están tres fiscales y allí son presentados, posteriormente los casos son remitidos a los fiscales de delitos comunes quienes ahora se encargarán netamente de la parte de investigación y una vez sean pasados al proceso en donde deberán ser sentenciados, llegan a mano de los fiscales 26 de juicio, quienes se encargarán de representar al Ministerio Público y continúan con el caso hasta el final.
Guerrero manifiesta que la especialización de las Fiscalías ha llevado a que se brinde un mejor servicio y que sea más expedito.
Recalcó que la clave era la prevención y por ello están trabajando con el Plan Nacional para la Prevención Social del Delito, Promoción y Defensa de los Derechos Humanos. “Si se logra que esa persona no actue fuera del marco de la ley o que se arrepienta de la falta cometida, tenemos un alto porcentaje de que no va a cometer un delito. Es por ello que desde las fiscalías municipales se está trabajando fuertemente con las comunidades.
En saber cuáles son los problemas, dónde están los focos de violencia; pues si se atiende bien a los factores generadores de conflictos, se evita que se germinen los delitos”, enfatizó el Fiscal Superior de la entidad.