La falta de mantenimiento y los numerosos botes de aguas servidas están acabando con la vialidad en El Manzano, dejando como consecuencia daños en los vehículos que a diario deben transitar por la zona.
Ramón Antonio García, un vecino, puso como ejemplo la avenida Sucre, en su primer tramo, donde las aguas servidas que salen de varias casas la han destrozado al punto de que pasar por allí es necesario hacerlo a mínima velocidad para que los carros no sufran desperfectos mecánicos, sobre todo en el tren delantero.
Dijo que en varias oportunidades han denunciado el problema en la alcaldía e Hidrolara pero hasta ahora no los han tomado en cuenta y conforme transcurre el tiempo, la vía, una de las principales de El Manzano, sigue deteriorándose.
“Esto ya es una laguna de aguas negras que, además de constituir un problema vial, lo es de salud, pues los charcos que existen permanentemente permiten la reproducción de insectos transmisores de enfermedades”.
Pero el problema de los huecos no existe solamente en la avenida Sucre sino también en otros sectores de El Manzano, como Las Casitas y La Plazuela por donde prácticamente ya no se puede pasar.
Agregó García que la situación es más grave en horas nocturnas pues algunas pandillas de delincuentes aprovechan que los vehículos deben reducir la velocidad al mínimo para atracar a sus ocupantes.
Además de pedir la reparación de la vialidad, García también exigió mayor patrullaje policial, en especial nocturno en todo El Manzano, para que las familias residentes puedan permanecer tranquilas en sus casas y salir o llegar a ellas a cualquier hora sin el temor de convertirse en víctimas de los antisociales.
“Esperamos nos escuchen y atiendan los problemas”, dijo García.
