Por trigésima séptima ocasión en menos de un año, los educadores adscritos a la Gobernación de Lara protestaron frente al edificio regional a fin de exigir una mejor remuneración salarial y respeto a su oficio profesional.
La acción de calle fue representada por la coalición sindical, asociación que agrupa al magisterio larense. Hilda Peña, representante del colectivo, informó las causas que generaron la protesta.
“Tomamos la calle luego de que el gobernador incumpliera la sentencia del Tribunal Contencioso Administrativo, en donde se obliga a la gobernación cancelar la homologación de los meses noviembre y diciembre del 2013, así como también la nivelación salarial del 2014. La primera solicitud la cumplió, pero la segunda no, por lo tanto nos siguió pagando los mismos sueldos de hambre que están estancados desde el 2012”.
Considera que esta acción se traduce en una reducción salarial que, según lo establecido en la Ley Orgánica del Trabajo, es una causa de despido indirecto.
“Condenamos la actitud del gobernador, quien es indiferente ante la situación de crisis del magisterio larense. Seguiremos en la lucha, si quieren paz escolar, dialoguen con nosotros”, apuntó Peña.
Por otra parte, exigieron celeridad en el proceso de jubilación de 3.000 docentes desincorporados de las aulas de clase.