La protesta de los médicos se mantiene vigente, a pesar de las soluciones parciales que ha dado el Ministerio del Poder Popular para la Salud con la reprogramación del presupuesto ordinario de la Gobernación de Lara, para cumplir con los pagos del aumento salarial del 75% hasta el mes de agosto, utilizando los recursos de finales de año para poder cumplir con este objetivo.
La Sociedad de Médicos Internos y Residentes del Hospital Central Antonio María Pineda y el Pediátrico Agustín Zubillaga, ratificó el paro de las intervenciones electivas y consultas externas, en una nueva fase del conflicto que será desarrollada en esta oportunidad no por los residentes de estos centros asistenciales, sino por los médicos adjuntos y especialistas de cada área.
José Manuel García, presidente del Somir, explicó que desde el mes de febrero han agotado todas las instancias correspondientes al sector salud, para buscar soluciones tanto a las deudas salariales como a la crisis asistencial que existe en el estado Lara.
“Se han logrado algunos acuerdos luego de los planteamientos que llevó Somir a las instituciones como portavoces de los pacientes, médicos y personal de salud del Hospital. Ya hemos tenido unas respuestas concretas al pago de los salarios con el aumento y esperamos que se cumpla el compromiso de entregar los créditos adicionales para cancelar los últimos meses del año y las utilidades”.
En cuanto a la materia asistencial, García informó que en el despacho del Ministerio del Poder Popular para la Salud se entregó un documento que refleja las causas que generaron y mantienen el conflicto médico, entre ellas la ausencia operativa de la Misión Barrio Adentro 3, encargada del mantenimiento preventivo y correctivo, reparación y entrega de equipos especializados de diagnóstico, además de la culminación de las obras de infraestructura pendientes en los centros hospitalarios con años de paralización, agilizar los procesos de contratación de personal del equipo multidisciplinario de salud y la desincorporación del personal que espera por su jubilación.
Asimismo, se refirieron a las deficiencias en la dotación de insumos y la coordinación con las autoridades locales para brindar mayor seguridad tanto a pacientes como al personal de salud en las instituciones hospitalarias.
“La asamblea y el conflicto se mantiene, pero estamos a la espera de que se cumplan los compromisos para honrar las deudas y solucionar las necesidades hospitalarias”.
