La situación del empleo en Venezuela, después de 15 años de este Gobierno, no es nada halagadora, si se toma en cuenta el cierre de más de 7.500 empresas, la desconfianza de los inversionistas, nacionales y extranjeros y la gran cantidad de trabajadores desempleados o semi empleados.
Así lo planteó Pablo Castro, director nacional sindical de Nuevo Tiempo y coordinador de Contratos y Conflictos de la CTV, quien estuvo en Barquisimeto para presidir una jornada de ese partido en materia laboral.
El dirigente sindical detalló que de los 13.500.000 trabajadores activos sólo la mitad tiene empleo fijo pues el 41% está incorporado a la economía informal y entre ocho y nueve por ciento se encuentra desempleado por completo.
Dijo que mientras eso ocurre, el Gobierno nacional invierte en otros países a través de las cuantiosas importaciones, además de agredir a la clase trabajadora. Puso como ejemplo los 200 dirigentes sindicales con régimen de presentación en tribunales y otros presos.
También se refirió a lo que está ocurriendo con el Instituto Nacional de Cooperación Educativa (INCE), cuyos ingresos dependen en 80% de trabajadores y empleadores, que fue creado para la formación de técnicos productivos y ha sido convertido en formador de dirigentes del socialismo.
También denunció que unos 5.000 instructores han sido despedidos del instituto durante el régimen actual.
Denunció las intervenciones del CNE en las elecciones sindicales y la violación de la autonomía sindical. Sobre los contratos vencidos en entes gubernamentales, los calcula en 300, y los firmados, como los de Cantv y el de los petroleros, no representan ninguna referencia positiva. sEl balance ,enfatizó, es la pérdida también de más de 200 mil millones de bolívares, una cantidad considerable con los llamados fondos chinos.
