El prolongado verano que está afectando el oeste del estado Lara, además de las negativas consecuencias en la ganadería, también se están sintiendo en la cañicultura con pérdidas para los agricultores.
En el municipio Torres, en los límites con los estados Trujillo y Zulia, especialmente con la primera de esas entidades, la reducción en la cantidad de hectáreas sembradas es significativa.
José Álvarez, presidente de la Sociedad de Cañicultores del municipio Torres (Socatorres), informó que en total son 90 productores en la zona, en la que había 8 mil hectáreas sembradas, de las cuales quedan actualmente 6 mil, que “arriman” 650 toneladas a los dos centrales, Carora y La Pastora.
La semana pasada Álvarez sostuvo en el ministerio de Agricultura y Tierras, en Caracas, una reunión con el fin de tratar la situación de ese rubro con la autoridad respectiva a fin de buscar solución a los problemas que confrontan.
Dijo que algunos productores han cambiado de rubro ante las pérdidas que les ha dejado el intenso verano, además de los problemas que se presentan por la falta de repuestos para sus maquinarias, muchas de las cuales están paradas, así como las dificultades para la adquisición de gasoil, necesario para el funcionamiento de las mismas.
Para Álvarez, la cañicultura nacional, concretamente en Torres, requiere de créditos a largo plazo para recuperar la producción con nuevas siembras, así como la perforación de pozos para riego y los agroquímicos que escasean en Agropatria.
Igualmente denunció la inseguridad como un problema grave para ellos, pues “vamos al campo expuestos a todo”.