El Tratado de Asunción, que el 26 de marzo de 1991 dio origen a la creación del Mercado Común del Sur (Mercosur), establece “la libre circulación de bienes, servicios y factores productivos entre países, el establecimiento de un arancel externo común, la libre circulación de las personas y la adopción de una política comercial común, la coordinación de políticas macroeconómicas y sectoriales entre los Estados partes y la armonización de las legislaciones para lograr el fortalecimiento del proceso de integración”.
A juicio del economista Jhonny Zafra, lo importante sobre Mercosur, integrado por Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela (adscrita en julio de 2012), es entender que se trata de una instancia creada para propiciar el comercio. “Sus miembros buscan integrarse comercialmente, comprar y vender los bienes que producen, algo en lo que Venezuela se encuentra en desventaja al ser un país monoexportador de petróleo”.
Las naciones de Mercosur deberían tener características similares para garantizar la efectividad del bloque. Por ejemplo, el índice de inflación debe ser cercano, “pero en el caso venezolano está muy por encima de los otros países y eso significa que los productos nacionales no son competitivos”, explica Zafra.
Para lograr que ese índice inflacionario del país se iguale con las otras naciones, “es necesario tener un esquema económico similar, dado que los miembros deben aplicar un plan de presupuesto parecido, además de contar con finanzas públicas sanas y precios adaptados al libre mercado, algo que no existe en Venezuela debido al control de precios y al control cambiario que impide la libre convertibilidad de la moneda”.
En tal sentido, para el economista, Venezuela no tiene ninguna ventaja dentro de Mercosur y su participación tiene pocas probabilidades de ser efectiva. “Somos un país monoexportador de petróleo que no puede competir con Brasil, nación que sí posee una economía diversificada”.
Venezuela debería comenzar a pensar en diversificar su sistema económico, si desea darle sentido a su participación en el bloque. “Por ello, ver a Mercosur con un enfoque político no es un camino lógico para el país. El objetivo del organismo, desde su creación, ha sido que los países puedan crecer y desarrollarse desde el punto de vista económico”.
