La guerrilla comunista de las FARC y el gobierno colombiano afinaban este lunes los detalles finales para la participación de las víctimas del conflicto armado en el proceso de paz, informaron ambas partes.
Las dos partes dieron hace 11 días luz verde a la «participación directa de las víctimas» en las conversaciones de paz de La Habana a partir del 16 de agosto, pero quedaron pendientes algunos aspectos de procedimiento que buscan consensuar en esta cita.
Fuentes de ambas delegaciones de paz confirmaron a la AFP el inicio de esta reunión preparatoria a puertas cerradas, que debe culminar el martes, pero declinaron revelar los temas precisos que están abordando.
«El tema de víctimas (…) ha generado una andanada enorme contra las FARC (…). Incluso quienes se esfuerzan por parecer neutrales (…), terminan haciendo parte del coro general según el cual los peores delincuentes somos nosotros», se lamentó el jefe máximo de las FARC, Timoléon Jiménez, «Timochenko», en un artículo divulgado el domingo.
La reparación de las víctimas es uno de los puntos más complejos de la agenda de paz, pues cada bando achaca al otro la culpa por la violencia, en un conflicto de medio siglo que ha dejado 220.000 muertos y cinco millones de desplazados.
«Buscamos el máximo de proporcionalidad. Eso tiene que reflejarse en los participantes», dijo a la AFP una fuente de las FARC, en alusión a que la guerrilla busca impedir que únicamente entreguen sus testimonios ante la mesa de diálogo las víctimas que apoyan la visión del gobierno.