A las 11 de la mañana de ayer se escuchó una sola detonación, y con ella caía un sujeto en plena acera del sector 10 de la carrera 12 de Indio Manaure.
Algunas personas se acercaron al hoy occiso y aseguraron que fue interceptado por par de motorizados. Se conoció que el ‘parrillero’ se bajó y accionó el arma en contra del hombre. Aunque otros curiosos indicaron que el disparo salió de un Toyota Corolla blanco que entró, dio la vuelta y se retiró del sitio.
Lo cierto es que el señor José Luis Mogollón Hernández (57), murió de forma instantánea tras recibir un disparo en la región occipital, que indicaba que su asesino lo había sorprendido y le llegó por la parte de atrás.
Uno de los seres queridos del hombre manifestó que la víctima residía en el barrio El Jebe, específicamente en los callejones 4 y 5, por lo que su presencia en Indio Manaure se debía a que al mes, entre cuatro a cinco veces, visitaba a su hija. Precisamente, la mañana de ayer iba a verla cuando fue asesinado, solo le faltaban cinco cuadras para llegar.
Un vecino se acercó y revisó a la víctima. Presuntamente cargaba 10 mil bolívares, que luego fueron entregados a los familiares. Mogollón Terán deja siete hijos, entre ellos un menor de edad.
Sobre su cuerpo se encontraba la joven que iba a visitar quien no paraba de llorar, a su lado estaba la esposa de la víctima. El señor quedó tendido boca arriba en la acera, tenía su brazo izquierdo vendado y cargaba un cabestrillo, porque una semana antes había sufrido una fractura tras caer de una moto, expresaron los seres queridos.
Mogollón Terán era comerciante, “vendía mercancía seca”, manifestó uno de los familiares, quien a su vez indicó que era una persona que no se dejaba de nadie, pero que sabía “no tenía enemigos”.
Una fuente allegada también reveló que al señor lo asesinaron, porque supuestamente uno de sus hijos se habría metido en problemas con unos delincuentes, pero la versión no fue corroborada por los cuerpos de seguridad.
Hasta el lugar llegaron efectivos del Eje Contra Homicidios del Cicpc, quienes hicieron el levantamiento del cadáver y comenzaron las averiguaciones. Por la forma como se dieron los hechos, los sabuesos manejan el crimen como una venganza.
Se conoció de manos de las autoridades que la víctima tenía ocho antecedentes. El primero del año 79 por el delito de lesiones personales, seguido del 86 por hurto genérico, en el 87 lesiones personales, en el 90 y 92 por hurto genérico, en el año 93 y 2009 por el delito de droga, y el último del 30 de marzo del 2012 por aprovechamiento de cosas provenientes del delito.
Salió a pescar
En otro suceso, Israel Enrique Rivas Giménez (25), fue asesinado de un disparo con escopeta en el rostro. El hecho fue a las 8 de la noche del miércoles en una laguna que queda en el sector Las Delicias de Bobare, al oeste de la ciudad.
Anisbel Giménez relató que su hijo tenía ocho meses viviendo en esa zona y que salió en compañía de unos amigos a pescar cachama cuando fueron sorprendidos por un grupo de sujetos, pero todos corrieron y Rivas Giménez se quedó.
La señora comentó que era operador de máquina pesada desde hace siete años y siempre cargaba dinero, por lo que cree que fue para despojarlo de sus pertenencias.
