La lluvia que durante la madrugada y parte de la mañana del lunes cayó sobre Barquisimeto permitió constatar una vez más la necesidad de que se cuente, con urgencia, de un nuevo sistema de drenajes que permita el paso de las aguas pluviales en calles y avenidas.
Mientras eso no ocurra, cada vez que llueva, la capital larense sufrirá por el caos vial que se genera en unas cuantas arterias viales por el elevado tránsito automotor.
Este lunes, como se esperaba, nuevamente los usuarios de esas vías protagonizaron congestionamientos por esa causa.
El caso es que en varios sitios específicos las enormes charcas se han hecho normales con cualquier aguacero, como ocurre en la avenida Lara, frente al cc Criser, donde hasta los comercios inmediatos resultaron inundados en esta oportunidad, incrementándose las pérdidas sufridas hace apenas unos días.
Se tiene entendido que desde Emica se hizo una limpieza a los drenajes del sector pero, evidentemente, no surtieron los efectos deseados y el mal persiste para desgracia de comerciantes y usuarios de la vía.
Y muy cerca de allí, en el lado este del cc Río Lama, otra laguna impedía el normal desplazamiento automotor, y lo mismo ocurría en El Pedregal 1, donde los conductores se ven obligados a buscar desvíos.
También en la avenida Morán, entre 23 y 24, los drenajes no funcionan y el agua se acumula, igual que en la carrera 23 con calle 35, donde la tapa de la boca de visita fue levantada por la presión.
En la intercomunal Barquisimeto – Cabudare, a pocos metros del semáforo del Carabalí, nada se ha hecho para que circulen las aguas de lluvia, igual que en la Ruezga Sur, en sentido norte-sur.
Pero la situación más grave se presenta concretamente frente al Polígono de Tiro y en el distribuidor, donde, cada vez que llueve, se originan largas colas.
Para el ingeniero José Vásquez, presidente de Emica, es necesario que Barquisimeto cuente con nuevos drenajes pues los existentes son insuficientes y en el caso de la avenida Lara, existen muchos restos de pasadas guarimbas, que no han podido ser retirados.
