Un nuevo medicamento para la hepatitis C mostró sus primeros resultados positivos en pacientes infectados tanto por esta enfermedad como por el VIH, que habitualmente son difíciles de tratar, según un estudio publicado este sábado.
A los pacientes se les administró sofosbuvir, un medicamento aprobado para el mercado estadounidense en 2013 que ha provocado controversia debido a su alto precio (cerca de 1.000 dólares por unidad) junto a otro ya conocido, el ribavirin.
El estudio, publicado en el Journal of the American Medical Association, fue realizado con 220 personas durante 12 a 24 semanas.
La mayoría de los pacientes (entre 67% y 94% dependiendo del tipo de hepatitis C que tuvieran y de si habían sido asistidos antes) vieron cómo la enfermedad desaparecía y no regresaba en las 12 semanas siguientes al fin del tratamiento. Más allá de este periodo de tiempo se desconocen las reacciones.
Tratar en conjunto la hepatitis C y el VIH es difícil porque los pacientes necesitan tomar para la primera el medicamento interferon, que se relaciona pésimamente con los antirretrovirales.
Siete de los 223 pacientes de este estudio lo dejaron por síntomas adversos, como fatiga, insomnio, dolor de cabeza y náuseas.
En un artículo adjunto al estudio, Michael Saag, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Alabama (sureste), dijo que la combinación de medicamientos es un «gran salto adelante» pero que su coste es demasiado elevado para un uso a gran escala: «Un tratamiento medio de 12 semanas cuesta 94.500 dólares y uno de 24, 189.000».
«Con suerte, la competencia entre los nuevos productos que lleguen al mercado en los próximos 18 meses resultará en un precio más bajo para los medicamentos».