La estatización de la Siderúrgica del Orinoco (Sidor) y fábricas de cemento en el país ha ocasionado una crisis en el sector, declaró Pedro Peña, secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción del estado Lara (Suticel).
Indicó que el 90% de las obras en la entidad, financiadas por empresas privadas, se mantienen paralizadas, por falta de cabilla y cemento. Este sector, aseveró, genera el 70% de la mano de obra.
“Mientras no salga el cemento y la cabilla a la calle no habrá obras de construcción. Son entre 12.000 y 13.000 trabajadores desempleados”, advirtió.
Señaló que apenas el 25% de los afiliados a Suticel, unos 2.200 obreros, labora en proyectos de construcción.
Con respecto a dos de las obras más ambiciosas del Gobierno Nacional en la ciudad, El Sisal y la Universidad Alma Máter, el vocero aclaró que están paralizadas por las mismas razones de escasez. Mientras, los obreros exigen su incorporación.
Se preguntó adónde dirigen la producción local de cemento, en vista de que “los tres hornos están en funcionamiento”.
Denunció que para adquirir material de construcción, se debe pagar hasta 400% de sobreprecio.
Se pronunció en contra de las invasiones y emplazó al Gobierno a “construir viviendas dignas”.