El alcalde de Iribarren, Alfredo Ramos, consignó ante la Contraloría Municipal 170 denuncias de carácter administrativo, correspondientes a presuntas irregularidades suscitadas durante la anterior gestión del ayuntamiento barquisimetano.
El mandatario enfatizó que “con esto no pretendemos perseguir a nadie, simplemente cumplimos con el mandato de Ley a fin de que se investigue cada caso y se establezcan las responsabilidades pertinentes”.
Señaló que “algunas de estas denuncias ameritarían responsabilidad política e incluso varias tienen carácter penal. Corresponderá a la Contraloría Municipal y a los órganos jurisdiccionales hacer las indagaciones y determinar sanciones y medidas que tengan que establecerse”.
“Aspiramos que las instituciones funcionen, no obstante, sabemos que en Venezuela los órganos del Poder Público permanecen secuestrados. La administración de justicia está totalmente parcializada y al servicio de las órdenes del Ejecutivo nacional”, dijo Ramos. En tal sentido, reiteró la necesidad de “reinstitucionalizar el país”.
Resaltó que “nuestra Constitución contiene importantes avances en materia de derechos sociales, y sobre todo establece que los delitos de lesa humanidad y corrupción administrativa no prescriben. Por lo tanto, esperamos que la Contraloría y el Ministerio Público sigan los cursos establecidos en la Ley y se pueda hacer justicia”.
El consultor jurídico de la Alcaldía de Iribarren, José Emilio Giménez, explicó que “en casi todos los entes municipales observamos inconsistencias en los bienes, algunos activos que no aparecen, así como conciliaciones entre estados financieros y cuentas bancarias que no coinciden, entre otras irregularidades”.
Señaló que “en el caso de Emica, tenemos casos de obras públicas que no cumplen con especificaciones técnicas de construcción, principalmente en materia del Plan Asfalto Parejo, con el cual se produjo un enorme desfalco al municipio. Incluso, nos encontramos con expedientes donde las contrataciones se realizaban luego de la ejecución de las obras. Además, tenemos el caso de los detectores de metales que se perdieron en Cortubar”.