Las dificultades para la adquisición de divisas han obligado a que los proveedores que importan los equipos médicos e insumos básicos para los centros de salud, no puedan surtir al país con sus productos, dejando el mercado con una grave escasez que con el pasar de los meses va en aumento.
El Dr. Ruy Darío Medina, director del Hospital Central Antonio María Pineda, destacó que, aunque el estado cuente con los recursos para la adquisición de nuevos equipos y repotenciar así los servicios del centro, las licitaciones quedan desiertas.
“Los proveedores no cuentan con los equipos que necesitamos y son meses de espera para tener respuestas negativas ante las peticiones. Es un problema nacional que el Ejecutivo debe solventar”.
Explicó que al menos para el Hcamp, dos concursos para la adquisición del tomógrafo han quedado desiertos, asimismo para la compra de máquinas de anestesia, monitores, básicos para las intervenciones. Mientras que para los equipos que pudieran ser reparados, no se encuentran los repuestos en el país, quedando así desincorporados.
“El principal problema es que no se hace el mantenimiento preventivo, que permita aumentar la vida útil de los equipos. El mamógrafo del hospital quedó inoperativo luego de 200 millones de mamografías. La máquina de rayos X está obsoleta y el resonador que nos daría el MPPS tenemos ocho años esperándolo”,
Pero no sólo han sido equipos médicos especializados, sino también los aires acondicionados para colocar en los pabellones que actualmente se encuentran sin funcionamiento.
“No se encuentran los aires acondicionados de 15 toneladas, necesarios para los pabellones que se han remodelado. Tenemos activos cinco pabellones a partir del día de hoy, de 10 quirófanos con los que cuenta el hospital por falta de insumos y materiales para culminar las remodelaciones”.
A ello se suma la falta de materiales básicos como guantes, cepillos y batas quirúrgicas, tubos endotraqueal, compresas, suturas, entre otros, que no permiten brindar una atención completa a los pacientes.