Las mujer es vista de distintas formas debido a la formación cultural que existe en cada uno de los países, para la gran mayoría es el sexo débil, por ser considerada como personas vulnerables, frágiles, situación que con el tiempo ha ido cambiando, y ha hecho que las mujeres dejen el delantal de la cocina de un lado y salgan a la calle a ganarse la vida.
El proceso para ser aceptadas no fue fácil. Los derechos de la mujeres comenzaron a ser vulnerados. No era aceptado que ellas realizarán trabajos de “hombres” y mucho menos que se destacaran más o fuesen eficientes a la hora de hacerlos.
Todas las mujeres son víctimas potenciales del maltrato y la violencia basada en género debido a qu en todas las sociedades ha prevalecido la desigualdad entre los géneros.
Debido a la escalada de violencia que se desató, sumado al valor de mujeres que decidieron no callar más, el problema comenzó a ser visto como social. Las Naciones Unidas en su 85ª sesión plenaria, el 20 de diciembre de 1993, ratificó la Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la mujer, donde se afirma que esta violencia es un grave atentado a sus derechos humanos.
Hisvet Fernández, coordinadora del Observatorio Venezolano de Derechos Humanos de las Mujeres, en Lara, comenta que la lucha comenzó a ser más fuerte y en el año 1999 lograron la creación de una ley en donde se mencionaba el tema de la violencia y la familia, pero no se tomaba en cuenta a la mujer como ser fuera del hogar. En el 2003 dicha ley fue derogada y quedó un vacío de tres años, tiempo durante el cual aumentaron de forma considerable los maltratos y muertes hacia las mujeres, prendiendo las alarmas de la sociedad y gobernantes ante la falta de una ley para poner freno a los agresores.
En el 2007, lograron crear la Ley Orgánica Sobre el Derechos de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
En su artículo 14 para la definición de la violencia contra la mujer reza: comprende todo acto sexista o conducta inadecuada que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual, psicológico, emocional, laboral, económico o patrimonial; la coacción o la privación arbitraria de la libertad, así como la amenaza de ejecutar tales actos, tanto si se producen en el ámbito público como en el privado.
En su artículo 15 define todas las formas de violencia, allí son nombradas 19, las cuales tienen sus penas y sus sanciones. Ellas son: Violencia psicológica, acoso u hostigamiento, violencia física, doméstica, sexual, acto carnal, prostitución forzada, esclavitud sexual, acoso sexual, violencia laboral, violencia patrimonial y económica, obstétrica, esterilización forzada, violencia mediática, institucional, simbólica, así como tráfico de mujeres, niñas y adolescentes y trata de mujeres, niñas y adolescentes.
Los más frecuentes han sido los siete primeros tipos de violencia señalados en la ley, así como acoso sexual, violencia laboral y institucional.
“Cuando una ley no tiene reglamentos es vacía, no se puede aplicar sin reglamentos, porque cada quien la va usar discrecionalmente y será aplicada dependiendo de sus intereses. La ley necesita tener un protocolo de como se toma una denuncia, para que todos sigan un mismo parámetros”, explicó la psicóloga Hisvet Fernández.
Tienen siete años esperando por el reglamento y se siguen incrementando las cifras de violencia y los casos de sentencia firme en el país son mínimos.
Durante el 2013 el Ministerio Público, inició 71 mil 812 causas de violencia contra la mujer, solo 67 fueron objeto de investigación judicial, se dieron 10.416 imputaciones, solo 517 casos llegaron a juicios y se libraron 454 órdenes de aprehensión, es decir, sólo un 0,33% de los casos fue resuelto en el sistema judicial.
Fernández explica que existe un 99% de impunidad en todos los casos de violencia contra la mujer denunciados.
“Esas cifras lo que hacen es desanimar a las mujeres, sin embargo, quienes no denuncian alientan al hombre a ser más violento y más cuando estamos viviendo dentro de una crisis económica, política”, destacó la coordinadora del Observatorio Venezolano de Derechos Humanos de la Mujer, núcleo Lara.
Son 18 estados en los que se evalúa el maltrato hacia las mujeres, y la entidad larense se encuentra de sexto lugar, en donde se presentaron el 9% de los casos, mientras Caracas que tiene el primer lugar tiene el 28%.
A pesar de los malos pronósticos y que se evidencia que la justicia venezolana poco se ocupa de los casos de violencia contra la mujer, el llamado es a que la mujer conozca sus derechos, saber que ni siquiera su esposo la puede obligar a tener relaciones sexuales cuando no quiera, así como otros temas en los cuales la ley protege a la mujer. No deben acostumbrarse a ser mandadas o ser objetos de maltrato y humillaciones de su pareja, jefe o cualquier otra persona. Debe ser libre en sus pensamientos y actos, nadie la puede frenar por simplemente ser mujer, explican las defensoras de los derechos de las mujeres.
Fernández alienta a las damas que son víctimas de agresión a que se acerquen a las instituciones o órganos previstos para la atención de las mujeres, en donde serán atendidas y ayudadas.
Algunos lugares donde se pueden canalizar denuncias contra el maltrato a la mujer son: el Instituto Regional de la Mujer (Iremujer), prefecturas municipales, ante el Ministerio Público, quien tiene la Fiscalía Tercera con atención para la mujer, el Cicpc, las Policías regionales y municipales, la Asociación larense de Planificación Familiar (Alaplaf), única organización nacional no gubernamental que se atiende el problema de la violencia y además presta atención a aquellas personas que tienen miedo de hacerlo.
452 mujeres asesinadas
Un estudio de violencia contra la mujer fue presentado por Cofavic ante la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos. El mismo explicaba que entre los meses de enero y octubre del 2013, se registraron 452 casos de mujeres asesinadas. Entre las víctimas 283 tenían edades promedios entre 18 y 30 años.
De todos los casos registrados 282 fueron causados con un arma de fuego , lo que equivale al 62%, en 68 casos fue por arma blancas, que sería el 15%, en 34 hechos se evidenció el uso de la fuerza física, que representa el 7,5% y 32 casos la muerte había sido por asfixia, un 7% de los casos. En otros 32 casos no pudieron constatarse las causas de muerte y 4 casos fueron producidas por quemaduras, que son el 0,8% del total denunciado.
Entre los estados con más casos está Distrito Capital con 93 (28%), Anzoátegui 46 muertes (14%), Aragua 45 crímenes (14%), Carabobo con 41 casos (12%), Zulia 39 muertes (12%), Miranda con 38 homicidios (11%) y Lara con 31 muertes (9%)
Un 45% de los hechos fueron cometidos en la calle, 33% en el hogar.
