Seis reclusos detenidos en el Centro de Coordinación Policial “Jiménez”, en Quíbor, se provocaron heridas en los miembros inferiores de sus cuerpos, como medida de protesta, por el hacinamiento en este centro de detención temporal.
Pasadas las siete de la mañana de este sábado, se realizó una requisa en la comandancia, en la que según testimonio de los familiares de los reos, los mismos fueron maltratados físicamente, lo que fue el detonante para que algunos reclusos decidieran autoflagelarse.
Los antisociales fueron trasladados al centro asistencial de la población de Quíbor, donde recibieron atención médica. Dos de los reos que participaron en la acción de protesta, manifestaron a viva voz a su salida del hospital “uno no nació preso, somos seres humanos, queremos que nos trasladen”, exigieron buen trato a los funcionarios que los trasladaron e indicaron “algún día estaremos en la calle”.
Este centro policial, es un recinto de reclusión provisional, y por tanto no cuenta con una capacidad apta para más de quince reos, y se conoció de manera extraoficial que en la actualidad la cifra de reclusos en el lugar se duplica.
Los familiares de los detenidos, también manifestaron que los funcionarios a cargo de este centro policial, los han agredido y que algunos efectivos policiales custodios, les cobran una vacuna, por pasar alimentos, cigarrillos o golosinas a sus familiares detenidos.
Otra denuncia que hicieran las personas a este medio de comunicación, fue la irregular disminución en el tiempo de visita de sus familiares recluidos.
«La visita es de una a dos de la tarde, y los sacan de cinco en cinco, pero ahora cuando quieren empiezan a dejarnos entrar a la una y media, y a sacar a más por vez, y hasta las dos de la tarde, pasen todos los familiares o no, y a veces algunos se quedan sin ver visita”, señaló un familiar, quien además afirmó que dentro del centro de detención, había más reos heridos.