Las bebidas bajas en calorías o light pueden ser útiles para bajar peso, incluso más que el agua, si forman parte de una dieta para perder peso. Así lo asegura un reciente estudio dirigido simultáneamente por investigadores estaodunidenses del Centro Anschutz para la Salud y el Bienestar de la Universidad de Colorado, y el Centro para la Investigación y la Educación sobre la Obesidad de la Universidad de Temple en Filadelfia.
El estudio, que ha publicado este martes «Obesity», apoya el consumo de bebidas light dentro de un programa integral de pérdida de peso y viene incluso a demostrar que frente al uso solo de agua en estas dietas puede tener mejores resultados incluir las bebidas bajas en calorías.
«Este estudio demuestra claramente que las bebidas light pueden, de hecho, ayudar a la gente a perder peso, contradiciendo directamentemitos surgidos en los últimos años que sugieren el efecto opuesto: ganancia de peso», ha señalado el doctor James O. Hill, director ejecutivo del Centro Anschutz para la Salud y el Bienestar de la Universidad de Colorado y coautor del estudio.
«De hecho, quienes consumieron bebidas light perdieron más peso e informaron de una sensación de hambre significativamente inferior que quienes solo bebieron agua. Esto refuerza que, si se intenta perder kilos, es posible disfrutar de bebidas light», advierte.
Esta es la principal conclusión del estudio clínico realizado durante de 12 semanas, sobre 303 participantes. Esta investigación, destacan, es la primera prospectivo y aleatorizada que compara directamente los efectos del agua y las bebidas light sobre la pérdida de peso, dentro de un programa para la pérdida de peso.
Menor sensación de hambre
Los participantes del estudio se asignaron aleatoriamente a uno de dos grupos: uno en que se les permitía consumir bebidas light, como refrescos light, tés y aguas con sabor, y otro, un grupo de control, en que solo bebían agua. Con la excepción de las opciones de bebida, ambos grupos siguieron una dieta y un programa de ejercicio físico idénticos durante la duración del estudio.
Concretamente, los sujetos que consumieron bebidas light perdieron un promedio de 13 libras (5,9 kg) un 44 por ciento más que el grupo de control, que perdió un promedio de 9 libras (4,08 kg). Más de la mitad de los participantes del grupo de bebidas light (64%) perdieron al menos un cinco por ciento de su peso corporal, lo que está demostrado que mejora significativamente la salud, incluida la reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares, presión arterial elevada y diabetes de tipo 2.
«Existe muchísima información errónea especialmente en Internet sobre las bebidas light que no está basada en estudios diseñados para probar causa y efecto», afirmaba John C. Peters, coautor del estudio y Director de Estrategia del Centro Anschuz para la Salud y el Bienestar de la UC. «Esta investigación permite que las personas que siguen una dieta confíen en que las bebidas edulcoradas bajas en o sin calorías, pueden representar un papel muy útil e importante como parte de una estrategia eficaz y completa de control y pérdida de peso».
Los investigadores recuerdan que este estudio viene a refutar que las bebidas light «no solo no obstaculizan las dietas, sino que, de hecho, son de ayuda para el control y la pérdida de peso». Asimismo, recuerdan dos estudios anteriores publicados en la ‘American Journal of Clinical Nutrition’ por investigadores de la Universidad de Carolina del Norte (EEUU),en 2012 y 2013, que demostraban precisamente la misma conclusión, que incluirlas en dietas ayudaba a conseguir una pérdida significativa de peso, y, por otra parte, que las bebidas light no impulsaban una preferencia por alimentos y bebidas dulces.