Para salir de esta crisis política, económica y social que está atravesando el país, los católicos debemos trabajar fuerte para lograr la paz, sin embargo, creemos que no puede haber paz sin seguridad pública, sin justicia y sin libertad.
Dicho pronunciamiento fue realizado por su eminencia el cardenal Jorge Urosa Savino, en una homilía por la paz, que presidió en el aula magna de la Universidad Católica Andrés Bello este miércoles y en donde hizo un llamado al Gobierno nacional para que solucionen los principales problemas que aquejan a los venezolanos.
«Los obispos venezolanos en varios comunicados que hemos escrito en estos últimos meses, insistimos en el respaldo de las exigencias que hace el movimiento estudiantil y en la necesidad de que el gobierno nacional escuche los planteamientos y de solución a los problemas del país», sentenció.
El también Arzobispo de Caracas, rechazó la violencia que se ha producido en estos últimos tres meses, sobre todo aquella generada por sectores radicales tanto del Gobierno como de la oposición.
En este sentido, hizo un llamado al Ejecutivo nacional para que de una vez por todas aplique una política general de desarme, a fin de garantizar la paz que se merecen todos los venezolanos.
«Nosotros los obispos pensamos que el esfuerzo por el diálogo entre el Gobierno y la oposición es muy necesario y debe continuar, por supuesto el gobierno debe dar respuesta a las peticiones que se le hacen con buena fe y llegar a acuerdos por el bien del país. No puede haber diálogo sin soluciones y eso requiere cambios, acuerdos y respuestas concretas», opinó.
Aprovechó la oportunidad para pedir la libertad plena de todos aquellos estudiantes detenidos en manifestaciones pacíficas a lo largo y ancho del territorio nacional, alegando que este tipo de protestas están amparadas en la Constitución nacional.
«No me refiero a los detenidos que han actuado como delincuentes, eso que quede bien claro. Debemos insistir en la defensa de los derechos de los detenidos. Es necesaria la investigación de los asesinatos y la sanción de los culpables», sostuvo.
Por otra parte, Urosa Savino se pronunció con respecto a la huelga de hambre que inició el excomisario Iván Simonovis, en el internado judicial de Ramo Verde.
«Los obispos venezolanos y yo en particular hemos solicitado en varias oportunidades medidas de gracia o medidas humanitarias con respecto al comisario Simonovis quien ciertamente está muy enfermo. Es un clamor del pueblo venezolano”.
El alto prelado concluyó la eucaristía exhortando al país a un respeto y entendimiento profundo.