Tres motorizados provistos de armas de fuego, supuestamente miembros de un colectivo, amenazaron de muerte al conductor y obreros de un camión compactador de basura al servicio de Imaubar y le prendieron fuego, quedando destruido por completo, informaron las autoridades locales.
El acto vandálico lo llevaron a cabo a la una de la madrugada, aproximadamente, en la avenida Libertador con calle 51, cuando el vehículo se dirigía hacia el vertedero de Pavia con el primero de los tres cargamentos de desperdicios de la noche procedentes de la zona comercial de la ciudad.
Tan pronto se tuvo conocimiento de lo ocurrido, los responsables de las otras rutas nocturnas de recolección se desperdicios se dirigieron hacia la sede de la empresa Urbaser y suspendieron la labor por temor a correr la misma suerte.
El alcalde Alfredo Ramos, el presidente de Imaubar, Miguel Rojas y el gerente de la operadora Urbaser en Barquisimeto, José Sánchez, calificaron el hecho como un atentado contra la ciudadanía, pues con la destrucción del camión compactador se reduce la capacidad de recolección de desperdicios en la ciudad.
Sánchez dijo que la unidad está valorada entre 4 y 5 millones de bolívares y que será difícil sustituirla.
Rojas, por su parte, señaló que ahora dejarán de recoger 27 mil kilos de desechos sólidos, pues el camión quemado transportaba 9 mil kilos en cada uno de los tres viajes que hacía en la jornada.
El alcalde Alfredo Ramos condenó el acto vandálico contra la operadora de Imaubar y la colectividad barquisimetana.
Consultado sobre el origen del hecho delictivo, lo atribuyó a uno de los colectivos armados que han venido operando en la ciudad.
“Por la forma de actuar, armados y en motos, se debe sospechar se trata de uno de los colectivos armados y pienso que ya es tiempo para que el Gobierno tome en cuenta a esos grupos”, afirmó.
Pidió una investigación sobre lo ocurrido por la gravedad del suceso y anunció que se solicitaría que funcionarios de la Policía Municipal o la Policía de Lara custodien a los trabajadores de las operadoras de Imaubar durante sus labores, sobre todo en horarios nocturnos para evitar nuevos atentados como los de la madrugada de ayer.