Durante la tarde de este lunes dos sectores del municipio Palavecino fueron escenario de violentas escaramuzas entre manifestantes y funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana.
Pasadas las cuatro de la tarde, desde lo lejos se podían escuchar las pavorosas detonaciones, así como percibir los efectos de los gases tóxicos que se esparcían desde Valle Hondo hasta Cabudare.
El congestionamiento no se hizo esperar en las arterias viales adyacentes a Valle Hondo, toda vez los manifestantes colocaron barricadas en la avenida El Placer y calle 1 de Las Mercedes.
Ataque despiadado
Vecinos de urbanización Altamira, indicaron a los medios de comunicación que “se ensañaron contra nosotros. Los guardias nacionales luego de destrozar la caseta de vigilancia, le prendieron fuego con gasolina que cargaban dentro de las tanquetas. Antes derribaron el portón de seguridad con dos embestidas al tiempo que bombardeaban con gases todas las cuadras al ingresar a pie y con motos. Esto se repitió en varias oportunidades, mientras los estudiantes lanzaban piedras contra una lluvia de metras”, narraron en medio de las secuelas de las lacrimógenas.
Muchas familias, relataron, luego del bombardeo, salieron despavoridos, unos a los centros de salud con ancianos y niños asfixiados, y otros a casas de familiares debido a los efectos de los gases.
“No hay palabras para describir”
En nuestro recorrido por el sitio, aun se percibía con intensidad las secuelas de las lacrimógenas. Los vecinos de Altamira, levantaron el amasijo de hierro que otrora era un portón y también recolectaron un saco de granadas y cilindros de lacrimógenos arrojados por la GN a techos y frentes de las viviendas.
“Esto era una batalla campal. Una experiencia traumática que debe vivirse porque no hay palabras como describirse”, dijo un vecino de avanzada edad.
Contra los portones
La saña de la GNB se evidenció en los doblados portones de la 5ta y 7ma etapa de urbanización Valle Hondo.
Ana María González fue testigo del derribo de uno de los cuatro portones desplomados por la tanqueta de la GNB, indicando que “estaba abierto porque no había luz y eran como las 4:20pm cuando uno de los 37 motorizados que invadieron la carrera 4 dio la orden que tumbaran el portón. Añadió: Destrózalo para que sigan pidiendo en la calle para su reparación”.
Otra vecina amplió que motorizados de la GNB treparon la cerca de la casa Nº 35-8 en donde se escondieron varios estudiantes y en donde había un vehículo estacionado. Rompieron sus vidrios, tanto de la casa como los del carro, y mientras unos desvalijaban el vehículo, otros lanzaban lacrimógenas dentro de la casa. La propietaria del carro acababa de llegar con un mercado el cual fue sustraído del carro, así como su cartera con más de 600 bolívares más su celular”.
Habitantes de Valle Hondo y Altamira, reiteraron que las manifestaciones concluyeron pasadas las siete de la noche, pero que las incursiones de las tanquetas en franco bombardeo a ambos lugares se prolongaron hasta las diez.
Durante la madrugada, fueron quemados y destruidos los puestos de ventas de CD de Valle Hondo, acción que algunos atribuyen a la GN al tiempo que otros afirman que el hecho fue perpetrado por los manifestantes.
Queman maquinaria
Paralelamente, habitantes de las urbanizaciones aledañas a la Ribereña, cerraron la arteria vial y se enfrentaron con la GN, generando una tranca descomunal.
Un jumbo de la empresa TevialCA, para la construcción del Distribuidor Tarabana, fue incinerado. El coronel Teodoro Campos, secretario general de Gobierno, condenó el hecho.
César Figueira: «No tengo información»
El general César Figueira, comandante de la 14º Brigada de Infantería, señaló que en el último enfrentamiento entre la Guardia Nacional Bolivariana y habitantes de Cabudare no se registraron heridos o detenidos.
“Vamos a seguir tomando las acciones correctivas para evitar que se causen daños”.
Los vecinos de Valle Hondo denunciaron que la GNB arremetió contra garitas y cercas. Sin embargo, el militar respondió: “No tengo información de los portones que se derribaron, me imagino que fueron ellos, los propios delincuentes (…) Las personas que tengan pruebas de abuso de las autoridades que presenten las pruebas ante el organismo que tenga que hacerlo y nosotros le vamos a dar curso”.
Reiteró que en Lara los cuerpos de seguridad no han cometido excesos.
