La espiral inflacionaria en Venezuela trastoca los escasos presupuestos en los colegios privados.
La profesora Erlinda Hartliep, presidenta de la Asociación de Colegios Privados (ALEP), indicó que más del 85% de los costos los asumen para el pago de la nómina, que además del sueldo incluye beneficios de política habitacional, seguro social, bono de alimentación, Inces y HCM.
El resto lo distribuyen en la adquisición de insumos para la operatividad de los colegios, y siempre registran déficit.
Sostuvo que la situación obedece a que el Gobierno nacional, a través del Ministerio de Educación, no estudia y analiza en profundidad la verdadera realidad por la que atraviesa este sector, para sincerar un aumento, el cual se ha mantenido siempre en 10%.
Lamentó que por esta causa unos cinco colegios en la capital del estado Lara han cerrado en los últimos años, de los 240 que existen en la entidad.
Estima que a principios de julio de este año el Gobierno haga el respectivo aumento del 10%, ya que no lo hace desde el período académico 2012-2013, mientras corre el Año Escolar 2013-2014 con el mismo incremento gubernamental, conocido a través de un tuit de la ministra Maryann Hanson, el cual se refiere a la continuidad en base a la resolución.
Sostuvo que entretanto los colegios privados evalúan el presupuesto de sus actividades extracátedras, deportivas, religiosas, culturales y de convivencia, entre otras.
Determinó que para el desahogo presupuestario de los colegios se hace necesario por parte del Gobierno el decreto de un aumento que ronde el 35%, para continuar con las actividades y no reponerlas, de esta manera se mantiene la calidad de educativa.
Indicó que la inflación revelada por el Banco Central de Venezuela no se corresponde con la verdad del mercado nacional, porque esta institución está con línea del Gobierno.
En vista de la apremiante situación, son los mismos padres y representantes quienes se sensibilizan y en asambleas discuten cuánto pagar, mediante acuerdo negociado, para que sus hijos reciban la mejor enseñanza-aprendizaje y los planteles no clausuren.
Opinó que los colegios privados estén amenazados si aumentan, sin que salga en Gaceta Oficial, pero agradeció a los representantes porque en mayoría toman las decisión de pagar lo razonable.
“Hemos solicitado reuniones con el Gobierno para presentarle la realidad presupuesta y no hemos sido atendidos”, expuso.
Por su parte, el docente Neri Carvallo, director del colegio San Vicente de Paúl, ubicado en la avenida Lara, con 65 años de funcionamiento, siendo su primera sede cerca del Parque Ayacucho, puntualizó que esperan el llamado del Ministerio de Educación, y la inclusión de una nueva matrícula mediante el Consejo Educativo.
También acotó que presentan un grave déficit presupuestario que los podría llevar al cierre de sus puertas en dos años si el Gobierno no los ayuda, ya que no les está alcanzando para el pago de sueldos a los profesores, comprar insumos y material de laboratorio, adquirir repuestos para las computadoras y material de oficina. Tampoco rinde para el mantenimiento de las áreas internas y externas.
Espera que en los meses de julio y agosto se produzca un aumento con apoyo de los representantes.