La emergencia del Hospital Central Antonio María Pineda “es un baño de sangre”, advierte el doctor Ruy Medina, director del centro de salud.
Los accidentes en motocicletas constituyen una de las causas principales de ese lamentable escenario que registra entre 30 y 40 lesionados cada mes. Sin contar los fallecidos y hombres en estado hemipléjico. “La emergencia colapsa, al igual que las salas de trauma. Los jóvenes se están prácticamente suicidando en ese medio de transporte”, sostiene Medina.
“Se trata, sin duda alguna, de un problema de salud pública. Y es así porque es exagerado el número de patologías que se presentan por accidentes viales en motocicleta”, enfatizó.
Según Medina, la última estadística arrojó 82 pacientes hospitalizados en traumatología, 48 por accidentes en motocicletas, de los cuales, 46 son por embriaguez. De esos 46, 36 accidentes se produjeron en horas nocturnas, particularmente los viernes, sábados y domingos.
Actualmente, en el hospital permanecen cuatro pacientes “descerebrados”, informó Medina. Dichos ciudadanos no alcanzan los 30 años de edad, y no podrán reintegrarse a ninguna actividad por su estado vegetal.
“A estas personas solo les late el corazón y respiran, requieren una sonda para evacuar y otra para alimentarse, sufren escaras, entre otras consecuencias producto de la irresponsabilidad”. El problema, además de generar lesiones en el ser humano, impacta en el presupuesto del centro de salud. El galeno contabilizó que cada paciente permanece al menos 20 días hospitalizado, lo que se traduce en 960 días que esas 48 personas le generarán al hospital.
Estos pacientes requieren hematología completa, química sanguínea (glicemia, urea y creatinina), examen cardiovascular, prueba preanestésica, Rayos X de cráneo, tórax y miembros inferiores. Un solo paciente puede demandar hasta diez placas, además de las tres tomografías que necesitan los que padecen traumas craneoencefálicos.
“El paciente traumatizado y hospitalizado implica operación, es decir, 82 intervenciones programadas. Cada una tarda dos horas aproximadamente, para un aproximado de 164 horas de cirugía, por consiguiente, una inversión altísima que realiza el hospital”.
En una intervención quirúrgica se utilizan hasta ocho paquetes de compresas. Esos 82 pacientes implica más de 650 compresas y 41 frascos de anestésicos, cada uno con un valor de 2.500 bolívares.
Se conoció que entre el 29 de abril y el 5 de mayo se efectuaron 29 operaciones de traumatología, algunas tardan más que otras. Por ejemplo, si una persona sufre fractura de húmero y fémur estará más de tres horas en cirugía.
Un paciente traumatizado puede esperar hasta tres meses por su intervención por diferentes razones: no se cuenta con el material, no tiene los exámenes completos, complicaciones patológicas, escasez de insumos, entre otras circunstancias, además de la alta demanda de operaciones. “Considero que estas cifras son muy alarmantes ya que de esos 48 accidentes en moto, 45 pudieron evitarse.
Casi todas las semanas hay muertos por estos accidentes”. Entre enero y mayo, 12 pacientes quedaron en estado vegetal, los cuales son remitidos a sus casas u otros centros de salud. A otros se les han amputado miembros.
A juicio del doctor Medina estas cifras se dispararon desde que el Gobierno comenzó a dar facilidades para la compra de motos, además de los índices de desempleo, lo que ha llevado a muchos a trabajar como mototaxistas para costearse la vida y la de sus familiares. “Las causas son simples: irresponsabilidad al conducir, violación de las normas de tránsito, el abuso de conducir por las aceras, las altas velocidades y el consumo de alcohol. Los motorizados no quieren entender que se están suicidando y desangrando el presupuesto del hospital”.
Se quebranta el Decreto 684
El 31 de enero de 2014 el gobernador Henri Falcón ratificó el restablecimiento del Decreto 684, emitido por el Ejecutivo Regional hace cuatro años, el cual contempla la circulación de motorizados de lunes a jueves hasta las 10:00 de la noche y a partir de las 5:00 de la mañana y de viernes a domingo hasta las 9:00 de la noche y a partir de las 5:00 de la mañana.
El decreto prohíbe el traslado de mujeres embarazadas en moto, que más de dos personas viajen en ese tipo de vehículo y el uso obligatorio del casco para el conductor y parrillero. Sin embargo, la mayoría de esos accidentes viales ocurren a altas horas de la noche y madrugada.
La edad de esos traumatizados oscila entre los 15 y 28 años de edad. En un promedio bastante alto se trata de hombres y una que otra dama en calidad de acompañante. En muchos de los casos, los usuarios no cargaban casco. Otro escenario que se aprecia constantemente es la circulación de hasta tres pasajeros en una misma moto, incluso niños.