Ciudadanos de los conjuntos residenciales adyacentes a las avenidas Lara y Capanaparo, al este de Barquisimeto, marcharon el jueves hasta la Fiscalía Superior de la entidad, con el propósito de expresar su repudio a la actuación de la Guardia Nacional Bolivariana durante las protestas de los últimos días.
Exhortaron mediante un oficio dirigido al titular regional del Ministerio Público, William Guerrero, a diligenciar una medida de protección para los habitantes del sector y sus bienes, por cuanto durante la noche del lunes y la madrugada del martes, cuatro de estos conjuntos residenciales sufrieron ataques y actos vandálicos.
Fotografías y videos publicados en diversas redes sociales, además de los testimonios de los propios vecinos, atribuyen la responsabilidad de los hechos a funcionarios adscritos a la Guardia Nacional Bolivariana, quienes presuntamente arremetieron contra portones, rejas y paredes con una tanqueta.
Desde muy temprano comenzaron a congregarse vecinos de Residencias Tau, Residencias Claudia, Parque Central, Los Girasoles, Cantarranas, Roca Tower, Vifrán y demás edificios de la zona, además de estudiantes y ciudadanos de diversos puntos de los municipios Iribarren y Palavecino como muestra de solidaridad con los afectados.
Cerca de las diez de la mañana emprendieron la marcha por la avenida Lara, entonando consignas y exhibiendo pancartas donde expresaban su rechazo al referido componente militar y exigían respeto a sus derechos ciudadanos, como la inviolabilidad del domicilio y la protesta cívica y pacífica.
“La GNB no cumple funciones de resguardo y defensa de los ciudadanos. Solo sirven para reprimir, ‘matraquear’ y atropellar a ciudadanos indefensos. Este cuerpo armado es una vergüenza para el país”, exclamó Desiree Felizola, vecina del sector.
“No es posible que ciudadanos decentes tengamos que vivir una noche de terror, porque a estos funcionarios les provocó entrar a unos edificios en busca de unos muchachos. Lamentablemente, nadie responde por los daños a la propiedad, por el portón derribado ni por los lesionados”, añadió.
Por su parte, Gisela Ospino señaló que “lo que ocurrió la noche del lunes y la madrugada del martes, cuando los efectivos militares derrumbaron los portones, dispararon e inundaron el ambiente con gases tóxicos, es una violación flagrante a los derechos humanos. Ante ello, decidimos movilizarnos y exigir a los autoridades que cumplan su deber de resguardar nuestra integridad”.
A su paso por el cruce de las avenidas Lara y Bracamonte, donde se encuentra la sede del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime), los marchantes hicieron una parada para exhortar a quienes tramitaban documentos de identidad a sumarse a “la lucha por los derechos de todos los venezolanos y nuestras libertades”.
Al llegar a la Fiscalía Superior, los manifestantes leyeron el documento suscrito por los vecinos de los conjuntos Tau, Claudia, Los Girasoles y Parque Central, donde solicitaron formalmente al Ministerio Público la medida de protección.
Algunos protestantes aprovecharon la ocasión para manifestarse en contra de la Resolución 058 del Ministerio de Educación y las medidas adoptadas por el Gobierno nacional en materia económica.
También se desarrolló un “potazo” a fin de recoger fondos para la reposición de los portones dañados.