El cantante canadiense Justin Bieber no será deportado de momento de los Estados Unidos como reclamaba una petición online ciudadana a la Casa Blanca que consiguió 273.968 firmas en menos de un mes. La administración de Barack Obama ha anunciado que no hará comentarios acerca de la solicitud de revocar la visa de trabajo del artista.
La Casa Blanca cuenta con una sección en su página web We The People en la que los ciudadanos pueden hacer peticiones al gobierno. Al superar el umbral de 100.000 firmas en un plazo de 30 días recibirán una respuesta oficial.
«Nosotros, el pueblo de Estados Unidos, sentimos que estamos mal representados en el mundo de la cultura pop. Querríamos ver a este peligroso, imprudente, destructivo y adicto a las drogas Justin Bieber deportado y su tarjeta verde revocada», sentenciaba la petición, archivada en los apartados de justicia criminal y aplicación de la ley, derechos humanos y asuntos de la mujer.
La petición señalaba que el cantante está «amenazando la seguridad de las personas» y que es «una terrible influencia en la juventud de la nación». «Nosotros las personas querríamos eliminar a Justin Bieber de nuestra sociedad», concluía. Sin embargo, en esta ocasión la Casa Blanca se ha negado a hacer comentarios acerca del caso para evadir la «apariencia de influencia impropia» y no interferir en las investigaciones por los delitos de los que se acusa al cantante -conducción bajo efectos de las drogas y resistencia a la autoridad, entre otros-.
«Así que dejaremos a otros comentar el caso del señor Bieber, pero nos alegramos de que os preocupéis por asuntos de inmigración». Con esta respuesta, la Casa Blanca ha aprovechado para insistir en la necesidad de una reforma migratoria, que haría crecer la economía y reducir el déficit «en casi un billón de dólares en los próximos 20 años».
«Eso supone unas 12.500 millones de entradas para conciertos de Justin Bieber o 100.000 millones de copias de su primer disco», ha añadido en el texto disponible en su web.
Bieber se encuentra en Estados Unidos con un visado válido «siempre y cuando no sea condenado por un delito de violencia». La Casa Blanca implantó este servicio para garantizar que se cumple el derecho a petición al gobierno, recogido en la Primera Enmienda de la constitución estadounidense.
No obstante, gracias a este plan la administración ha tenido que abordar temas tan insospechados como la construcción de la Estrella de la Muerte, la base militar espacial que aparece en La Guerra de las Galaxias. «Aunque no ha sido posible dirigirnos a sus preocupaciones sobre el señor Bieber, esperamos que creáis que su experiencia We The People ha sido positiva», ha concluido la Casa Blanca.
