Un explorador de la NASA finalmente abandonó la órbita lunar y cayó sobre la superficie del satélite natural de la Tierra, como estaba previsto.
Los controladores de vuelo confirmaron el viernes que el Explorador Lunar de la Atmósfera y el Entorno de Polvo (LADEE) de la NASA se estrelló en la cara oculta de la Luna, apenas tres días después de sobrevivir a un eclipse lunar completo, algo para lo que nunca fue diseñado.
Los investigadores creen que la sonda espacial seguramente se hizo añicos al estrellarse, debido a su extrema velocidad orbital de 5.800 kilómetros por hora (3.600 mph), contra una montaña o al lado de un cráter. No se cree que hayan quedado escombros a la vista.
“Está destinada a hacer mella», afirmó el científico del proyecto Rick Elphic.
La noche del jueves, la nave rozó la superficie lunar a una altitud increíblemente baja, de apenas 100 metros (300 pies). Su órbita se redujo a propósito la semana pasada para asegurar que se estrellara esta semana después de una misión científica extraordinariamente exitosa.
El LADEE fue lanzado en septiembre desde Virginia. El mes pasado completó su misión científica principal de 100 días y volaba en tiempo extra.
La prórroga permitió que la sonda volase durante el eclipse lunar del martes por la madrugada. Sus instrumentos no fueron diseñados para soportar una oscuridad y un frío tan prolongados, pero la pequeña nave espacial _del tamaño de una refrigerador casero_ sobrevivió, con apenas un par de sensores de presión en funcionamiento.
Pasará por lo menos un día o dos antes de que la NASA sepa con precisión dónde se estrelló la nave, aunque el punto en el que dejó de transmitir datos indica que a duras penas terminó en la cara oculta de la Luna.
El LADEE no tenía suficiente combustible para permanecer en órbita lunar más allá del final de la misión y mantener la recolección de datos. Desde el primer momento la NASA planeaba estrellar la sonda en el lado oculto de la Luna, lejos de los artefactos de las misiones Apolo, que llevaron varios hombres al satélite entre 1969 y 1972.
Durante su misión de 280 millones de dólares, el LADEE identificó varios componentes de la fina atmósfera lunar _neón, magnesio y titanio, entre otros_ y estudió el velo de polvo que rodea al satélite, creado por las partículas de la superficie que se levantan de la superficie tras el impacto de micrometeoritos.
“La taza de datos científicos del LADEE realmente se desbordó», dijo Elphic a principios de mes. “Al ir a la Luna, el LADEE en realidad permitió que visitáramos otros mundos con similares atmósferas tenues y entornos con mucho polvo».