Proteger la piel y cuidar la alimentación de los niños es una tarea que padres y representantes deben valorar durante el asueto, así lo acotó la doctora Idabelis Arias de Anzola, jefa de la Unidad de Agudos y subdirectora encargada del Hospital Pediátrico Agustín Zubillaga.
Durante los largos períodos de exposición al sol, los niños deben estar bien hidratados con agua y jugos de frutas naturales en abundante cantidad, nada de refrescos carbonatados, enlatados o preparados industriales. Es preciso humectar la piel con un protector solar de amplia cobertura. La insolación, explicó, puede llevar a una deshidratación y provocar problemas renales, neurológicos y metabólicos por la alteración de los electrólitos.
Las altas exposiciones producen quemaduras de primer grado, ampollas y descamación de la piel con ardor y enrojecimiento.
Alimentación
Arias de Anzola mencionó que durante los asuetos se comen alimentos inapropiados o mal conservados, causantes de las indigestiones. “Hay personas que cocinan en la madrugada y consumen el alimento entre las 2 y 3 de la tarde, sin conocer a qué temperatura estuvo esa comida o si se descompuso. Se incurre en el error de suministrarle a los niños comidas muy condimentadas, saladas o dulces lo que genera trastornos digestivos, vómito, náuseas y diarrea”.
La ingesta de bebidas carbonatadas, té y chucherías de bolsa con alto contenido de sodio, no deben suministrarse a niños de ninguna edad y mucho menos por debajo de los 2 años, destacó.
Picaduras de insectos
Lo primero es prevenirlas con la vestimenta adecuada, repelente y mosquiteros. “Si ocurre una picadura única se puede dar antialérgico medicado y dosificado por el pediatra y colocar en la picadura hielo por poco tiempo, si es masiva es preciso ir al médico”. La doctora advirtió que la aguijonadura del escorpión para los pacientes pediátricos en muy grave, por lo cual hay que acudir rápidamente al médico.
La galeno recomendó cargar alcohol, agua oxigenada, adhesivos, curas, compresas frías, suero oral, acetaminofén y antialérgico medicado y dosificado por el pediatra, según edad y peso del niño. No sugirió antidiarreicos ya que la diarrea sería autolimitada. “No es recomendable trancarla ya que la toxina seguirá su acción sobre la mucosa intestinal”.
Servicio irregular
Arias de Anzola declaró que el servicio de quirófanos del Pediátrico no se ha normalizado porque no ha concluido el mantenimiento de los ductos debido a la falta de filtros de carbón. “Luego, hay que someter al pabellón a otra limpieza profunda y 24 horas después es necesario prender una luz ultravioleta por el tiempo que establece la norma, luego se podra abrir el servicio”. Los pacientes, dijo, se han tenido que desplazar a otros centros hospitalarios que han colaborado con el Pediátrico para hacer las intervenciones. Se conoció que se realizan entre 12 y 20 operaciones diarias.
Insumos
El Pediátrico trabaja con limitaciones, no todos los insumos están disponibles, aclaró Arias de Anzola.
“Algunos insumos no se consiguen en el mercado, los proveedores dejaron de cotizar ciertos insumos que son necesarios y que no tenemos en el almacén. Nuestros médicos los compran en las clínicas de su propio bolsillo o los piden prestados”.
Indicó que no hay problema con los anestésicos, pero sí con los medicamentos de inducción y recuperación anestésica.
“Hay para resolver por corto tiempo, esperamos que la situación mejore. Nuestro presupuesto es deficitario y no alcanzará para todo el año, mientras tengamos compraremos los insumos necesarios y aquellos que los proveedores nos coticen”.