El Nobel de Literatura colombiano Gabriel García Márquez, de 87 años, se encuentra «muy frágil» de salud aunque permanece estable en su casa de Ciudad de México, según un comunicado de su familia difundido la noche del lunes por el diario colombiano El Tiempo.
«Su condición es estable aunque se encuentra muy frágil y existen riesgos de complicaciones de acuerdo a su edad», señalaron en un comunicado fechado en México su esposa, Mercedes Barcha, y sus hijos Rodrigo y Gonzalo.
El texto, de dos párrafos, no menciona la información publicada horas antes por el diario mexicano El Universal acerca de que el escritor vuelve a padecer un cáncer linfático.
La familia agradece las muestras de cariño recibidas por amigos y medios de comunicación y pide «que se respete su intimidad».
Una trabajadora de la vivienda de García Márquez únicamente confirmó a la AFP la existencia de un comunicado de la familia del escritor y que fue enviado a El Tiempo.
El pasado 8 de abril, el novelista salió en estado «delicado» del prestigioso Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (público) de la Ciudad de México después de haber estado ocho días internado por un cuadro de neumonía.
García Márquez «sigue y seguirá convaleciendo en casa», avanzó la familia en el comunicado.
Sin identificar sus fuentes pero asegurando que son «confiables», El Universal publicó que el cáncer linfático que se le diagnosticó al escritor hace 15 años se ha expandido ahora al pulmón, ganglios e hígado.
Debido a los órganos comprometidos y a su avanzada edad, la familia y médicos habrían decidido que el escritor no reciba tratamiento oncológico y sea atendido «a través de cuidados paliativos» en su casa, en el sur de Ciudad de México, según el periódico.
«No tengo ningún comentario a hacer», se limitó a decir a la AFP su hijo Gonzalo vía telefónica sobre la información publicada por el periódico mexicano.
El Nobel entró a la clínica el 31 de marzo, pero no fue hasta tres días después que las autoridades informaron de su hospitalización.
Afincado en México desde hace más de tres décadas, García Márquez ha vivido los últimos años retirado de la vida pública y en sus escasas apariciones ha preferido no hacer declaraciones a la prensa.
El colombiano es considerado una de las principales plumas de la historia de la literatura en español y autor de algunas de las novelas más aplaudidas del siglo XX, como su obra cumbre, «Cien años de soledad» (1967).