El Sistema Cambiario Alternativo de Divisas (Sicad II) es una válvula de escape en el mercado cambiario en palabras del economista Gerardo Álvarez.
El también profesor apuntó que el mecanismo cambiario con una tasa que oscila los 50 bolívares por dólar no sustituirá al Centro Nacional de Comercio Exterior (Cencoex) ni al Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad).
Cifras oficiales suministradas por el vicepresidente del Área Éconómica, Rafael Ramírez, indican que el Cencoex financiará el 80% de las transacciones económicas relacionadas con las importaciones y el Sicad alrededor del 12%. Por lo tanto, el Sicad II solamente manejará el 8% del mercado cambiario.
Para el economista es “matemáticamente imposible” que el Sicad II tenga una oferta ilimitada.
“El Sicad II no va a salvar la economía del país, no va a solucionar la escasez de divisas y no va a resolver el problema de abastecimiento”.
El Gobierno dispone este año de $42.500 millones, aproximadamente: $1.000 millones para el Cencoex y $11.500 millones para el Sicad. “A mi juicio ahí no está incorporado el monto para el Sicad II”.
Aunque la tasa del Sicad II es legal, observó, es especulativa y se desconoce cuál es el criterio para fijar el precio final.
Cuatro tasas de cambio
El 15 de enero el presidente Nicolás Maduro anunció en cadena nacional que la tasa oficial del dólar sería a 6,30 bolívares para todo el año. Sin embargo, el 24 de enero fue creado el Sicad II, subrayó el economista.
Venezuela tiene cuatro tasas de cambio, no tres como dice el Gobierno, agregó. “La tasa muy privilegiada del Cencoex a Bs. 6,30; la tasa privilegiada del Sicad que oscila entre 10 y 11; la tasa del Sicad II alredor de los 50 y el mercado paralelo que ronda los Bs. 70 a pesar de la variabilidad en el comportamiento de esta última tasa”.
Nicolás Maduro y, antes Hugo Chávez, afirmaban que el mercado paralelo era un mercado marginal y no representaba un peligro cambiario. Sin embargo, increpó el especialista, el actual presidente aseguró que el objetivo del Sicad II era “derrocar” al mercado paralelo.
“Estas contradicciones en política cambiaria demuestran el grado de desconocimiento de quienes conducen la economía del país, la ausencia de criterios profesionales para enfrentar este problema y las decisiones erradas que llevan al mar de incertidumbre económica”.
¿Mercado sostenible?
Para Álvarez hay incongruencias en el discurso de Ramírez cuando se refiere al mecanismo cambiario.
El titular de Pdvsa señaló que en el Sicad II habría una oferta “infinita” de dólares, hecho incierto en palabras del especialista. El límite de los dólares del país está fijado por el precio del petróleo, el cual cayó de $105 por barril a $96 (si se comparan los primeros trimestres de 2013 y 2014).
“Esa disminución le genera al Estado una pérdida diaria de $55 millones, que proyectado a todo el año dejaría una disminución de $20.000 millones en los ingresos petroleros de 2014, por cierto el tamaño de nuestras precarias reservas internacionales”.
Acotó que la industria presenta “serios desequilibrios” en la producción de barriles diarios, otro balance negativo para un “petroestado”.
El Sicad II, dijo, es un mecanismo de administración de divisas controlado por el Estado. Desmintió que se trate de una subasta regida por el libre juego de la oferta y la demanda.
“Son otras las variables que determinan el precio del dólar Sicad II y no es otra que la fijación unilateral por parte del BCV”.
Para Álvarez la principal beneficiaria del mercado cambiario es Pdvsa, la cual tendrá un elevado flujo de caja.
Devaluación fiscalista
El Sicad II podría calificarse como una devaluación fiscalista, comentó.
Sin embargo, vaticinó que el Gobierno seguirá con el subsidio de bienes esenciales a Bs. 6,30.
Los alimentos, medicinas y compras del Estado siguen con la tasa Cencoex. Álvarez desestimó que esos rubros sean transferidos al Sicad, el cual auspicia otro conjunto de bienes a Bs. 11 aproximadamente.
“Si, hipotéticamente, todos los bienes de Cencoex se trasladaran a Sicad habría una devaluación espantosa de 350%. No se ha visto jamás en los anales de la historia venezolana”.
Tampoco, planteó, trasladará los bienes preferenciales al Sicad II para evitar una maxidevaluación superior a 700%.
Aunque descartó que el Gobierno elimine el control de cambio, a corto o mediano plazo, aclaró que la apertura del Sicad II es un acierto. Podría tratarse de una flexibilización del mercado cambiario.
