El robo de dos busetas durante el pasado miércoles y jueves de la semana en curso, desencadenó que los transportistas decidieran suspender sus actividades de forma escalonada hasta tanto no consigan las unidades. La decisión se concretó a través del consejo consultivo.
La acción de protesta comenzó desde el mediodía de este viernes, cuando los conductores acataron la orden de paro y cerraron los accesos del Terminal de Pasajeros de Barquisimeto por más de tres horas.
Alrededor de 3.200 transportistas adscritos a las líneas urbanas del área metropolitana Barquisimeto – Cabudare y otros 3.000 de las suburbanas participaron en el conflicto por solidaridad gremial.
Geovanny Peroza, secretario general del Sindicato Automotor del estado Lara, informó que las unidades hurtadas pertenecen a las rutas 3 y 15.
“Se suscitaron dos robos en menos de 48 horas. El primero de ellos ocurrió el miércoles en El Cují, cuando sujetos fuertemente armados secuestraron al conductor de la Ruta 15 cuando éste estaba surtiendo combustible en una estación de servicio. Luego de varias horas, lo soltaron en la medianoche en el sector El Trapiche de Tamaca y se llevaron la buseta”, relató.
“Luego, al día siguiente, se produjo un segundo robo en el sector San Francisco, cuando robaron un compañero en la puerta de su casa”, prosiguió.
Ambos casos fueron reportados ante los organismos de seguridad. “Si las autoridades no consiguen el paradero de las busetas, los transportistas realizaremos paros parciales durante los próximos días”, advirtió.
Planes de seguridad fracasados
Peroza subrayó que los planes de seguridad planteados para el resguardo de las unidades de transporte público ha fracasado, puesto que continúan los incidentes con delincuentes y charleros que ingresan a las busetas para acometer sus delitos.
“En el consejo consultivo se aprobó también la no autorización de pagar rescate, por cuanto son los organismos de seguridad que tienen la responsabilidad de responder por los robos. Todavía estamos a la espera de un operativo eficaz que garantice la seguridad de transportistas y ciudadanos”.
El dirigente gremial espera respuestas contundentes de los organismosde seguridad a fin de que se restablezca el servicio con prontitud.
“Estamos conscientes de que nuestra paralización afecta a la población, pero nos vemos obligados a tomar estas medidas de protección ya que cada unidad es el sustento de nuestros transportistas. El robo nos deja en la calle. Ahora más que nunca cuando una buseta de 24 puestos, la más sencilla, cuesta más de dos millones de bolívares”, finalizó.
