Profesores y autoridades de la Universidad Central de Venezuela, sostuvieron este lunes una reunión para condenar la represión en contra de los estudiantes de esa casa de estudios, por parte de algunos cuerpos de seguridad del Estado y que se evidenció el pasado miércoles cuando los jóvenes marchaban con destino a la Defensoría del Pueblo.
En este sentido, la rectora de esta casa de estudios, Cecilia García Arocha, explicó que la marcha fue convocada por los estudiantes y la misma transcurrió pacíficamente por varias horas, hasta que los funcionarios decidieron disolver a los manifestantes.
«La dirección de mantenimiento de nuestra UCV, recolectó los residuos de más de mil bombas lacrimógenas, analizados por nuestra Facultad de Ciencias, para luego ofrecer un informe final a las autoridades que será dado a conocer en su momento. Esa actuación sin duda alguna fue una brutal represión», precisó.
Insistió que las marchas son pacíficas y el Gobierno no puede seguir criminalizando la protesta.
Por otra parte, condenó que algunas personas contratadas por la universidad y adscritas a la dirección de seguridad, hayan capturado a cinco personas que participaban en la marcha y los entregaran a la Guardia Nacional.
«El director de seguridad de la UCV nos informó que habían capturado a cinco personas que tenían armamento militar, que consistía en bombas lacrimógenas, chalecos antibalas y máscaras anti-gas. Ellos pidieron autorización para entregarlos a los cuerpos de seguridad y nosotros nos negamos ya que se debía consultar con asesoría jurídica, ellos hicieron caso omiso a la orden y entregaron a los muchachos para no quedar mal con el Gobierno y por esto nos vimos en la obligación de destituirlo a él, al subdirector de seguridad y al jefe de operaciones», sostuvo.
Reveló que de los cinco capturados, tres de ellos eran estudiantes de la Universidad Santa María y los otros dos son familiares de dichos jóvenes, quienes salieron plenamente en libertad porque no tenían ningún tipo de evidencias en su contra.
Arocha indicó que las clases en la UCV se mantienen, sin embargo, por la situación del país, el Consejo Universitario decidió flexibilizar el régimen de asistencia y las evaluaciones.
Finalmente, Víctor Márquez presidente de la asociación de profesores de la UCV, indicó que como gremio apoyan la protesta pacífica y condenan las agresiones en contra del movimiento estudiantil y las autoridades universitarias.